ZOUK MAGAZINE (Versión en Español) NÚMERO 4 | Page 178

rer unir a personas y disfrutar alrededor de una mesa, de la comida. Esta comida es un reflejo de la diversidad cultural del mundo dutch-indonesian. Es parte de quien soy, un niño que creció entre dos mundos. La razón por la que escribo libros de cocina es porque quiero compartir recetas que me hacen feliz y hacer que otros disfruten con la misma experiencia. Al mismo tiempo, ayuda a promover mi objetivo, mi misión, que consiste en promover y preservar el legado culinariodutch-indonesian. Intento lograrlo haciendo que la comida sea más accesible y generando entusiasmo entre las generaciones jóvenes. Si quieres preservar una cultura tienes que vivirla. Y en este caso es cocinar, compartir y contar la historia que hay detrás. Y este es también el objetivo de mi nuevo libro que trata sobre los inicios y la gestación de esta cocina, porque pienso que en ocasiones es necesario hacer un parón y una llamada de atención. Hoy en día, muchos holandeses, y no exactamente con raíces euroasiáticas, han incorporado en sus cocinas ingredientes y platos dutch-indonesian, pero también de la cocina indonesia en general. Considero que la gastronomía de Holanda ha sabido incorporar muy bien otras tradiciones culinarias. En mi opinión, Holanda ha creado una cocina de fusión muy interesante. ¿Crees que la cocina dutch-indonesian es un ejemplo o hablamos de algo diferente? Quiero decir que por una parte hablamos de cocina de fusión en los Países Bajos y por otra reconocemos infinidad de influencias holandesas en países de todo el mundo dado su vasto imperio colonial, pero la gastronomía dutch-indonesian es un proceso que empezó en el periodo colonial, pero hoy es una tradición particular y diferente. ¿Crees lo mismo? En mi opinión la cocina dutch-indonesian es diferente a la cocina indonesia porque ha evolucionado de manera diferente. La cocina dutch-indonesian cuenta con una larga tradición y es el primer estilo culinario que provocó un cambio importante en los hábitos culinarios holandeses y en su menú. Mientras que el estilo culinario y las convenciones sociales entorno a la comida actuales no son nuevas, reconocer el valor de la cocina (en la escuela por así decirlo) se ha convertido en una prioridad. La comunidad dutch-indonesian está reduciéndose paulatinamente y sus tradiciones van diluyéndose a partir de las influencias de las culturas dominantes. Asumimos que la comida es indonesia y punto y nos olvidamos de una tradición que se gestó durante más de 400 años. Y esto ocurre incluso en los Países Bajos, donde hay personas que todavía no distinguen la diferencia que existe entre dutch-indonesian e indonesio. Es una línea fina, lo admito, si tenemos en cuenta que este tipo de cocina se gestó en el seno del territorio indonesio. Lo mismo ocurre cuando hablamos de cocina vasca o catalana, aunque se encuentren dentro de la gastronomía española, por supuesto. Me interesa mucho explicar la diferencia, porque así la gente podrá entenderla y nuestra cocina recibirá el reconocimiento que merece, como otro tipo de cocinas de