ZOUK MAGAZINE (Versión en Español) NÚMERO 1 | Page 99
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de tostar café y puntos de tueste, cafés puros o mezclas, tipos de extracciones y baristas. Las posibilidades para el consumidor, para el buen aficionado, son infinitas.
Pero de todo este café que se produce alrededor de los trópicos de nuestro planeta, algo así como 140 millones de sacos de 60 kilos, solo una pequeña parte es realmente especial, única. Y eso, apreciado lector, no lo vas a encontrar en cua lquier
lineal de supermercado. Esto te costará parte de tu tiempo, un pequeño esfuerzo
que el mejor café te recompensará con creces, exhalando un aroma y un sabor incomparables. Y no creas que esto te va a costar muchísimo más dinero, solo unos
céntimos más.
Hoy en día los cafés muy especiales proceden de una caficultura moderna y
sostenible, llevada a cabo por expertos caficultores con el apoyo de agrónomos
que tienen como principio la excelencia del producto, la preservación del medio
ambiente y la calidad de vida de los agricultores que la hacen posible. Por tanto, la calidad entendida como un conjunto de atributos o características del café
(olor y sabor) y también sobre el proceso de producción (ético, equitativo y respetuoso con el medio ambiente).
Durante nueve meses, el caficultor se prepara para los tres meses de recolección. Ha cuidado sus árboles, los ha podado, fertilizado, abonado y mimado.
Ese café que tomas es una de las dos semillas que había dentro de una fruta
que debe recolectar madura, lo que le obligará a pasar por cada árbol de cuatro a ocho veces durante la temporada para que le dé el equivalente a menos
de medio kilo de café tostado. Durante veintiún días, necesitará separar la semilla del resto de la fruta y secarla. Después la dejará reposar entre uno y tres
meses. Bajará de las montañas y se embarcará para hacer el trayecto hasta su
destino en los países consumidores. En
el tostadero y durante aproximadamente quince minutos cambiará de color, de
tamaño, de olor y de sabor. Después y
antes de convertirse en una bebida, cada
grano se convertirá en unas mil partículas preparadas para dejar pasar el agua.
El recorrido ha sido largo y costoso hasta
ti. Así que prepárate: elíjelo a tu gusto, en
tu tostadero favorito. Escoge un buen molinillo de muelas y la cafetera que prepare
el café que a ti te gusta. Ensalza sus virtudes con agua mineral y no lo bebas ardiendo. Ahora ya puedes disfrutar de tu taza de
café. Es tu momento personal e intransferible con tu café.