Zasqua Journal no. 4 | Page 48

Biocontroladores, únicos y necesarios Catalina Montoya Todos sabemos que cada ser vivo en el mundo cumple con una función especial. Se podría pensar que cada especie es parte de un organismo, y si alguna llega a faltar, todo se viene abajo. Las otras partes seguirán cumpliendo con su trabajo, pero el producto final no será el mismo ya que todos dependen del otro. Una de las importantes funciones que se deben cumplir en el mundo es ocupada por los artrópodos, conocidos coloquialmente como “bichos”, y éstos varían según específicas características. Hay tres funciones que los artrópodos cumplen: abonar, biocontrolar, y polinizar. En este texto, exploraremos específicamente como la función de los artrópodos biocontroladores es afectada por su alimentación. Esta función es crucial para que todo funcione en orden, ya que además de hacerse cargo de eliminar las plagas, se asegura de limpiar el ecosistema de desechos en descomposición para que otros animales puedan vivir en el lugar y las plantas puedan crecer sin problemas. Se puede dividir este trabajo en la alimentación de animales vivos, muertos o en estado de descomposición, y plantas vivas o en proceso de descomposición. En el grupo de la alimentación basada en animales vivos podemos encontrar al ciempiés (Chilopoda). Son beneficiosos en jardines y huertas, ya que controlan las plagas. 48 / Zasqua Jounal no.4 Se alimentan de insectos, arañas, gusanos, lombrices, babosas, caracoles y, si llegan a no encontrar alimento, pueden llegar a consumir otros ciempiés. Algunas especies más grandes, como el ciempiés gigante, puede llegar a comer, además de lo mencionado anteriormente, sapos, lagartos, pequeñas serpientes y ratones. Estos artrópodos tienen un potente veneno, el cual los hace excelentes cazadores, razón por la cual pueden llegar a comer animales tan grandes relacionados a su tamaño. Otro artrópodo que se puede encontrar en en este grupo es la libélula azul (Zygoptera). La principal función de estas es cazar, o atrapar presas, para así evitar que la población de estas incremente en niveles exagerados. Algunas de las presas que la libélula caza, incluyen pequeños insectos, desde moscas, mosquitos y huevos de artrópodos, hasta animales terrestres, como lo son los pequeños coleópteros. En el siguiente grupo el trabajo principal no es cazar, sino más bien limpiar. Aunque estos animales también controlan, en este caso la cantidad de “desechos”, se encargan más de limpiar lo que ya está descompuesto o en estado de descomposición que de matar o cazar para que la reproducción no continúe. Sin ellos viviríamos en un basurero de carne muerta. En este grupo podemos encontrar al cucarrón estafilínido. La mayoría de estos son carnívoros se alimentan de carne muerta, pero también se alimentan de material en descomposición. Algunos se pueden alimentar de plagas, como lo son las pulgas y los ácaros. También podemos ver en este grupo a las tijeretas (Dermaptera). Aunque estas también