Virgilio Piñera al borde de la ficción (La Habana: Editorial UH / Letras Cubanas, 2015) | Page 35

186 « VIRGILIO PIÑERA AL BORDE DE LA FICCIÓN. COMPILACIÓN DE TEXTOS » ser aburridor en materia narrativa significa tener ganada las tres cuartas partes de la buena fama literaria. Si en su próxima obra Goyanarte logra en verdad interesar, de seguro que podrá aspirar a esa fama. Alexandre Arnoux: La cifra*2 Hasta ahora, las cajas fuertes ajenas se abrían mediante el robo previo de la «combinación» o, más expeditamente, por fractura. En La cifra, Arnoux nos propone un tercer recurso: el del número cabalístico. Apela a un tour de forcé -ingenioso pero inconvincente- el joven parisiense Darzy, que se desempeña como secretario de Feurstein, para abrir la caja fuerte de este último, que es un hombre de imaginación tortuosa y de personalidad escindida. Añadamos que Darzy no quiere en modo alguno abrir esta caja con propósito de robo: su intención es puramente psicológica: abatir el desmedido orgullo de su patrón, desconcertar su alma con esta prueba terrible. Para la adivinación de dicha clave, Arnoux levanta un complejo andamiaje conceptual a partir de las relaciones existentes entre el número y la persona. Baraja cifras como si fueran cartas, fatigando al lector con series y combinaciones numéricas, a veces gratuitas. El autor parece haber olvidado que este rompecabezas de los números solo se justifica cuando los guarismos vienen a satisfacer o encauzar un problema real. Estamos dispuestos a fatigarnos con el cálculo de los gastos mensuales o con los miles de puntos ganados o perdidos en la canasta... pero nos rebelaremos si, como en el caso de esta ingeniosa novela, esos guarismos nos ofrecen una solución forzada. El ingenio, como las matemáticas o la astronomía, tiene sus leyes y es perfectamente verificable. Otros novelistas han sabido verlas, y los resultados han sido óptimos. Borges, por ejemplo, se permite toda clase de licencias con el ingenio: en sus libros la invención llega por momentos a «sofocar» al lector, pero tanto el uno como la otra se cuidan mucho de caer en el fácil recurso ideado por el autor de La cifra. Descontando este deus ex machina, la novela queda como notable ejemplo de penetración psicológica. En pocos libros como en este el tema del desprecio toca una nota tan baja y alcanza con su radiante análisis niveles tan altos. Feurstein, en su furor despreciativo, amontona miles de fichas para «sacar los trapos sucios» de los genios de la literatura, la historia, la ciencia... Su obra estaría fundada en el odio que le inspira el género humano, y que hace extensivo a la mucama, a su cochero, a su cocinera. Estos le pagan con la misma moneda. De tal * 2 El Hogar, Buenos Aires, 13 de abril, 1956, p. 54. Alexandre Arnoux: La cifra, Sur, Buenos Aires, 1955.