Vida Médica Volumen 67 Nº2 - 2015 | Page 28

28 Vida Médica Lectura Mobile una vida marcada por su compromiso gremial y social Esta mujer, intensa, apasionada y con una inquebrantable vocación de servicio, ha enfrentado todos y cada uno de los desafíos que la vida le ha impuesto, compatibilizando su rol de madre, con su dedicado trabajo como pediatra y su destacado rol como dirigente. O riunda de la zona rural del Maule “al sur” como subraya, pediatra broncopulmonar del Hospital Exequiel González Cortés donde ejerce la jefatura de pediatría, presidenta del Departamento de Trabajo Médico, miembro de la Comisión Negociadora Colmed/Minsal y galardonada este año con el Premio de Honor Dra. Eloísa Díaz a la trayectoria gremial y profesional; la Dra. Rebeca Paiva es hija de una profesora de castellano que trabajó en un liceo y un arquitecto del Mop, profesionales dedicados por vocación al servicio público, que vinieron a Santiago persiguiendo un gran objetivo: construir un país mejor. Pero sus carreras, al igual que sus sueños, se vieron truncadas con el Golpe de Estado del 73. Ambos fueron exonerados, su padre incluso pasó por el centro de detención del Estadio Nacional. Hechos que marcaron la historia de una mujer que, según ella misma dice, ha construido su camino “con lo que la vida me ha ido poniendo por delante”. Lo que se hereda no se hurta, y su vocación por lo público, por lo político social, por el compromiso con un mundo mejor, es una marca indeleble de familia. “El ejemplo de mis padres determinó mi interés por el ámbito gremial, opinar y buscar los rincones donde uno pueda expresarse como persona, pero lejos de los partidos políticos a los que no les creo. Yo vi como abandonaron a mi padre así que no pertenezco a ninguno”, aclara. La medicina fue uno de estos caminos que la vida se encargó de mostrarle casi por casualidad. Se preparó con tres amigos para la Prueba de Aptitud Académica. Ellos querían estudiar medicina, a ella le gustaba la biología. Le fue bien y quedó en la Universidad de Chile. Realizó sus estudios en medio de un país convulsionado y en esta etapa no participó todo lo que hubiera querido en el tema político. Pero no fue por temor, fue simplemente por amor: no estaba dispuesta a poner en riesgo a su padre. Vida gremial: rompiendo los