REPORTAJES
DIARIO
DE UN VAPER
Roberto Incertis @hannvapes
Probé el tabaco por primera vez con 12 años y con 14 ya fumaba de
forma habitual, por aquello de ver a los mayores del instituto que lo
hacían a escondidas en el patio o en la puerta a la hora de la salida.
Pasaron los años y aquel hábito siguió cada vez más instaurado en
mi día a día. Por entonces, fueras a una cafetería o a la discoteca de
moda, el ambiente era el mismo: humo y más humo. Una situación
que, por suerte, a día de hoy a cambiado y ya no es así.
Intenté dejar el tabaco decenas de veces, pero jamás tuve la
voluntad sufi ciente para vencer la adicción y es que, en mi paso por
esta mortal adicción, había llegado a la cifra de 2 cajetillas y
media diarias.
Conocí el cigarrillo electrónico allá por 2013 coincidiendo con el
primer “boom” del sector y pude reducir parte de esas cajetillas
diarias. Sin embargo, el mercado se encontraba en una situación
muy inestable donde se abrían, cerraban y traspasaban tiendas a
diario y los dispositivos en aquel momento no conseguían saciar mi
dependencia, utilizase la nicotina que utilizase.
Y así continué hasta 2015 cuando decidí buscar en internet
alguna tienda cercana a mi domicilio donde poder informarme,
ver dispositivos y probar líquidos. ¡Di en el clavo! Me sorprendió la
variedad de dispositivos que me enseñaron, los distintos sabores,
recambios y posibilidades que tenía al alcance de mi mano. Ese día
escuché por primera vez palabras como RDA y RTA. Salí de la tienda
convencido de que aquel Evic VTC mini me ayudaría a combatir mi
adicción al tabaco. Y así fue; no volví a tocar un cigarrillo hasta 3
meses después donde, con una sola calada, pude comprobar aquel
horrible sabor que sentí años atrás y que me dejó bien claro que no
quiero volver a tocar uno de esos cilindros asesinos.
Cuatro años después continúo vapeando y ayudando a aquellos que
quieren dejar de fumar, con un sentimiento enormemente gratifi cante.
28 VMS3
Tomas Mizutis @tomas.mizutis
Empecé a fumar con tan solo 13 años porqué todos mis amigos
del instituto lo hacían y me parecía chulo. Pero, con el tiempo, el
fumar se convirtió en un vicio que me provocaba ciertos problemas
de salud.
A los 20 años, trabajando en hostelería, consumía dos paquetes de
tabaco al día. Desde los 13 a los 20 años intenté dejar de fumar sin
éxito.
En 2011 probé los primeros cigarrillos electrónicos que se vendían
en todos los bazares llamados “cigalike” pero no lograba que
saciaran mi adicción, y ya en 2013 me compré un eGo-T para darle
otra oportunidad al vapeo. Este último ya me funcionó un poco
mejor que el “cigalike” gracias a que en la tienda donde lo compré
me asesoraron sobre el dispositivo, me recomendaron la nicotina
necesaria, y me dejaron probar varios líquidos hasta encontrar el
que más me gustó. Desgraciadamente, cuando la mayoría de las
tiendas de vapeo cerraron, irremediablemente volví al tabaco.
Por suerte, ¡en 2018 redescubrí el vapeo! Y esta vez cavé profundo
y me asesoraron en una gran variedad de dispositivos y líquidos de
todos los sabores, así como los miligramos de nicotina necesaria;
conocí gente que son expertos en vapeo y me dieron apoyo durante
todo el camino. En un principio no conseguí dejar de fumar, pero
si reducir mi consumo de tabaco en una gran cantidad, ya que
disfrutaba más del vapeo que del tabaco. A los pocos meses
conseguí dejar de fumar al 100% y ya llevo 8 meses sin mal olor,
dientes más sanos, respirando mejor y sobre todo, ¡gastando menos
dinero! Actualmente puedo decir con orgullo que llevo varios meses
sin fumar y sin ansiedad, disfrutando como hobbie de mis líquidos
y dispositivos favoritos y me siento realmente cómodo y feliz. ¡NO
PIENSO VOLVER AL TABACO!