¿Y a continuación?
Bueno, eso depende de ti. Realmente esperamos que esta colorida y esperamos que i inspiradora te haya dado todo lo que necesitas para lanzar este proceso en el lugar en que vives. Con la estructura y procesos correctos en su sitio, serán capaces de hacer cosas increíbles. ¿Qué anhelas hacer? ¿Qué anhelas crear y ver emerger en el mundo que te rodea, en el lugar que llamas tu hogar? La Transición comienza con proyectos más pequeños, que son vitales para darle a las personas confianza, la sensación de que un cambio es posible y lo que posiblemente sea su primera experiencia de trabajo colaborativo con otros.
La Transición es profundamente ambiciosa. Quiere cambiar las formas en que los lugares en que vivimos se alimentan, se albergan, se emplean y generan energía. Es bastante pedir. Y va a tomar tiempo, determinación y unidad. Pero es vital recordar que la manera en que realizas tus proyectos importa tanto, incluso más, que los proyectos en sí mismos. Lo que estamos haciendo aquí no es sólo crear proyectos que reimaginan y reconstruyen el mundo. Lo que es igual de importante es la forma en que trabajamos, las culturas organizacionales que creamos, que también deben modelar el tipo de mundo que queremos crear. De nada sirve intentar crear una cultura nueva, más sana y resiliente si terminamos reproduciendo las formas de relación y trabajo poco saludables que sustentan nuestra cultura actual.
Lo que hagan, lo que creen, está limitado sólo por su creatividad y por el grado hasta el cual se permitan creer que todo es posible. Mantengan su inspiración en alto estando atentos a lo que otros grupos de Transición están haciendo en otras partes del mundo. Y luego vayan a cambiar el mundo, comenzando por su propio pequeño rincón.
Ungersheim en Francia es un ejemplo increíble de lo que la Transición puede lograr con el apoyo comprometido del gobierno local. La historia es estrella de su propia película, Qu'est ce qu'on attend? (¿Qué estamos esperando?) realizada por la cineasta Marie-Monique Robin.
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