OTRAS EXPERIENCIAS
dedicando algunas sesiones de sus clases al
mismo, quedando enganchados desde el
primer momento al mismo.
Una vez más las propuestas fueron
increíbles:
Concurso de cortos (teniendo como lema
la cocina).
Jornada de convivencia, donde
realizamos una caminata y una visita cultural
al pueblo de Artenara y que titularon: “Un
paseo por la nubes”.
Concurso de cocina, donde los grupos
iban rotando cada pocos minutos.
“Diseña tu plato”, donde antes de cocinar
debían hacer un boceto del plato y después
llevarlo a la práctica.
Pesado de fruta por clase en los recreos.
Dinamización de los recreos con juegos.
Taller para Primaria, donde cada cual
dibujó su fruta favorita y donde la mejor de
cada grupo obtenía esa fruta como premio,
debiendo hacer sus creaciones y poner título
al plato, siendo la valoración muy positiva
entre todo el profesorado y alumnado de
Primaria. Para nosotros, ver al alumnado de
3º PDC hablando con soltura en público y con
dedicación a las niñas y los niños pequeños
de su centro era algo que no tenía precio.
También para el propio grupo que expuso,
porque disfrutó y corroboró que se había
sentido muy bien, tal y como nos apuntó
Laura en la introducción de este artículo.
Rosa María Arteaga Herrera
Conclusión
Como conclusión diremos que, cuando el
programa no se ha podido ofertar por los
motivos que fueran, se han seguido
realizando actividades a petición del
alumnado, tales como: concursos de cocina
navideños, torneos lúdicos en los recreos,
desayunos saludables, talleres de cocina.
Es mágico observar cómo mientras
realizan sus aportaciones no hay diferencias
entre unos y otros. Perdemos la noción del
tiempo. La creatividad se va colando más y
más, siendo una fiesta para los cinco
sentidos. La gran mayoría se engancha y
todo el que quiere tiene su espacio para
aportar su granito al grupo, una forma de
trabajo que deja huella. Es un camino que
favorece el desarrollo personal del alumnado
ya que, cuando disfrutamos de lo que
hacemos, somos felices, y por ende, el
rendimiento es mejor.
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