DESARROLLO
ALGUNAS VECES
ACIERTO…
Y LAS OTRAS
APRENDO
Muchos de los dichos y refranes acuñados por
la cultura popular que aprendimos de peque-
ños los hemos incorporado como verdades o
creencias. Y como ya sabemos, las creencias de-
terminan nuestros comportamientos, es decir,
nos comportamos de forma coherente con lo
que creemos. Análogamente, nuestros compor-
tamientos generan determinadas consecuencias
o resultados; por tanto, los resultados que con-
seguimos son la consecuencia inevitable de las
creencias que elegimos sustentar.
Más vale pájaro en mano que ciento volando. Si
funciona no lo cambies. Trata a los demás como
a ti te gustaría ser tratado… Y tantos otros.
El riesgo con los dichos y refranes es que los
compramos con mucha facilidad, principalmente
porque son transmitidos por nuestros familiares
cuando somos jóvenes, y por casi todo el mundo
a través de los medios de comunicación. Si tantas
personas los repiten y utilizan para argumentar
lo que hacen o deciden es que serán verdad, ¿no?
Tomemos como ejemplo esos tres, que he elegi-
do intencionadamente.
Tal vez podamos estar de acuerdo en que los dos
primeros son conservadores, es decir, son adqui-
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ridos por individuos que han elegido una men-
talidad conservadora. Una mentalidad en la que
prima la seguridad y la certidumbre de la zona de
confort. Probablemente este rasgo lo muestren
en otros muchos comportamientos; como por
ejemplo apelar a la tradición como argumento
indiscutible para explicar su comportamiento o
forma de pensamiento.
También conocerás a otros individuos que han
elegido lo contrario: más vale cientos de pájaros
volando que uno en la mano, y si funciona bien
trata de cambiarlo para mejorarlo aún más.
Podríamos estar de acuerdo en etiquetar a esos
individuos como progresistas o innovadores,
porque han elegido rechazar esas verdades,
transformándolas en sus contrarias. Se trata de
individuos que se encuentran cómodos retando
frecuentemente su zona de comodidad.
Los profesionales de marketing conocen muy
bien estas mentalidades diferentes y han llega-
do a determinar lo que han denominado la Curva
de Adopción, fundamental a la hora de predecir el
consumo de un producto nuevo cuando es lanza-
do al mercado.
El tercer dicho suele ser utilizado como una for-