HISTORIA I
Magazine
Acción heroica en el Conflicto
del Falso Paquisha
Han pasado más de 35 años de la hazaña de la tripulación del EP-561,
al mando del Cap. EP Daniel Ángeles Silva, donde con mucha valentía
participaron en el primer desembarque de tropas en la toma del PV-22.
E
l conflicto entre
Perú y Ecuador tuvo
inicio el 22 de enero de 1981, día en
el que el gobierno
peruano denunció el ataque a
una de sus aeronaves que estaba
realizando una misión de abastecimiento destinada a puestos
de vigilancia fronterizos en el río
Comaina. El entonces presidente
peruano Fernando Belaunde Terry, ordenó la inspección del río
hasta su nacimiento situado en
el lado oriental de la Cordillera
del Cóndor. Durante la inspección se encontraron tres destacamentos ecuatorianos con sendas instalaciones en territorio
considerado del Perú por parte
del gobierno peruano según los
tratados anteriores. Estos destacamentos habían capturado los
antiguos Puestos de Vigilancia
46
(PV) N° 3, 4 y 22.
La posición ecuatoriana señalaba que esos destacamentos
correspondían a la base de «Paquisha” establecida en territorio
ecuatoriano. Pero, tras la medición de las coordenadas, se
comprobó que no correspondían a la mencionada Paquisha aceptada en el Protocolo
de Río de Janeiro sino, como
lo calificó el presidente peruano Belaúnde, a un “Falso Paquisha”, nombre que le dio para
poder distinguirlo fácilmente
de la primera Paquisha que sí
era legal según el protocolo.
A continuación, el Capitán
EP Daniel Ángeles Silva y piloto
del Mi-8T, nos da su testimonio sobre lo ocurrido durante el
primer desembarque de tropas,
con el fin de retomar el control
del PV-22.
El día 19 de enero de 1981
recibimos la orden del Comandante General de la Aviación
del Ejército (AE), de viajar al
norte para apoyar su visita por
las guarniciones de Zarumilla,
Papayal, Corrales, El Alto, Lobito, Talara, Suyo, Las Lomas,
Pelados, Sullana, Querecotillo,
y finalmente Piura; para lo cual
nos desplazamos a la ciudad de
Tumbes, donde nos pusimos a
sus órdenes el día 20.
El día 28 a las 08.00 horas
recibimos la orden de salir lo
más antes posible hacia Pinglo, para llevar un equipo de
mantenimiento y una bomba
de combustible que se necesitaban con carácter de urgencia.
La tripulación del helicóptero
EP-561 estaba conformada
por mí como piloto, Tte. Américo Sánchez Aguado (copilo-
to), So3. Jorge More Briceño
(ingeniero de vuelo), So3. Julio
López Guzmán (armamentista)
y So3. Gaspar Retamozo Sánchez (operador común).
El My. Nuñez del Prado, el
cual se encontraba con su aeronave averiada, nos contó las
incidencias de los días pasados
en los que se intentó conquistar
el PV-22 y su participación en
los bombardeos, manifestándonos que fue él quien realizó el
primer bombardeo real.
Tras cumplir varias misiones
en diversos lugares, aterrizamos en Comainas el día 30 de
enero por órdenes de nuestros
superiores. Al llegar, un soldado
nos comunicó que subiéramos
al puesto de comando, pues el
Gral. Montesinos necesitaba la
presencia de todos los pilotos
y copilotos de los helicópteros