SanFran Today Junio 2017 | Page 9

retos de escritura

Escribir un relato utilizando dos personajes basados en dos personas que te hayan sorprendido un día e inspirado por una canción escuchada en bucle.

Imagen para Bachillerato Imagen para la ESO

Hemos recibido relatos de Bachillerato, por lo que los siguientes relatos se refieren a la imagen de la izquierda.

DISTRACCIONES

“Distractions, like butterflies are buzzing ‘round my head.

When I’m alone I think of you,

and the things we’d do if we could only be through

with these distractions.”

Paul McCartney

Todo mi pensamiento se concentra en un solo punto, una mancha remota en el fondo de tus ojos cristalinos. Es la única manera de no naufragar cuando de improviso me miras y siento la humedad de tus pupilas como agua que corre entre los dedos sin detenerse.

Un leve aleteo me distrae de mirarte mirar. Un cosquilleo en mis pestañas, como si alzaran el vuelo y rozaran tu frente. Un gesto rápido de tu mano parece corroborar la ilusión, pero no es posible, me digo, mientras parpadeo desconcertada. No obstante una mariposa monarca se ha posado de este lado del cristal y su dibujo me es extrañamente familiar. Qué curioso, esta mañana me pinté con los mismos colores. Pero en seguida retomas la conversación y trato de seguirte, aunque el calor y la sensación creciente de perder mi seguridad si mantengo la conexión visual empiezan a marearme. Necesito algo de agua y sin querer se me escapa ese gesto tan mío de morder el borde del labio que denota al mismo tiempo inquietud y necesidad de control. Has perdido el hilo tú también, me doy cuenta, y eso me divierte. No sé qué responder o cómo ayudarte a seguir. Otro aleteo me roza el borde de la boca en el lugar donde noto aún la presión de los dientes. Otra mariposa monarca se posa en la ventana.

Alguien abre la puerta de la sala, entra con prisa dejando una disculpa al vuelo y vuelve a salir. La corriente levanta un papel y lo deja un instante suspendido. Te rozo la rodilla al alargar la mano en el aire, y sobre la palma otra monarca abre y cierra sus alas. No puede ser coincidencia y el pinar que rodea el edificio no es motivo suficiente para justificar semejante casualidad. Tres mariposas nos miran a contraluz mientras la sorpresa creciente se va haciendo hueco entre el espacio que nos separa, que, ahora me doy cuenta, es cada vez menor.

Ya no hay vuelta atrás, pero de todas maneras me levanto. Voy a resolver cosas pendientes. Escucho mis propias palabras sin convicción y mientras me giro las tres monarcas alzan el vuelo al notar la presión de tu mano sujetando mi muñeca con firmeza. No quiero volverme, no quiero ahogarme de nuevo en tus ojos, no me atrevo hasta que noto un cosquilleo sobre la lengua. Es un beso largo, como un agujero negro, volcado sobre sí mismo hasta agotarse en su centro. Cuando nos separamos no puedes articular palabra y entonces adivino las alas de otra monarca tras el borde de tus dientes.

Yolanda