SAMIZDAT | Crónica de una vida nueva Diciembre 2015 | Page 4
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SAMIZDAT diciembre 2015-enero 2016
UN CANT A LA TERRA
(CATALUNYA T´ESTIMO)
Clamores amenazantes,
se oye un cantar intenso,
triste, fúnebre, denso,
que proclama expectante,
que se acerca un tiempo
nuevo,
que va a volver lo de antes,
de que entrasen arrogantes,
los soldados extranjeros.
Los sitiadores avanzan,
¡Ahora, llegó el momento!
Sobre Barcelona el fuego,
las llamas crecen y danzan.
Los sitiados irredentos,
que hasta el final aguantan,
luchan ya sin esperanza,
ya bien se saben muertos.
Hoy se levantan los mismos,
que cayeron en septiembre,
los que callaron por siempre,
maldiciendo su destino.
Hoy les tocó hacer camino,
con la gente de Poniente,
no arraigó bien la simiente,
la ley del reino vecino.
Catalunya se alza triunfante,
pidiendo golpes de hoces,
gritando insultos, reproches,
¡Nos limitan, nos esconden!
Sus hijos portan errantes,
banderas hechas de sangre,
enseñas teñidas de noche
(tantas, me dan miedo).
en la platja de Sant Pol,
la terraza en Calicó,
y en Sant Elm una boda.
En el Rafael navega
el pirata Barbarroja,
que toda la costa asola,
y Palamós siempre saquea.
Sienten que no los valoran,
que no los quieren, les roban.
No ven su propia violencia,
de Perpignan a València,
y desde Fraga a Menorca.
Aunque sea castellano (y
Acusando la decadencia,
orgulloso),
debe llegar sin demora,
acaso ¿Qué culpa tengo?
i, inde, independencia
¿Es que no ves que te quiero,
¡Anem ja, ara és l’hora!
que te soy fiel cada verano?
Permanece, te lo ruego,
Tú que corriste a Madrid
quédate a nuestro lado,
a verme recién nacido
por ser de ti ciudadano,
conoces mi primer estío
por conocer tu invierno (conoy los demás hasta aquí.
certe mejor).
En tus calas, con tus pinos,
en tus playas yo crecí.
Mas si te vas, como temo,
¿Es que no sabes que viví
no me impidas la vuelta,
en ti tan dulces retiros?
no desates la tormenta,
deja que habite tus pueblos
Premià, Sitges, Cadaqués,
pues mis mejores momentos
Carrilet de Sant Feliú,
me vio y me dio esta tierra.
sobre el puente, Besalú,
Calella en Palafrugell.
Mi Sant Feliú dorado,
El passeig de Sagaró,
yo volveré a tu nido,
Montserrat, y l’Alt Urgell,
quiero gritar muy alto,
la abadía de Ripoll,
¡Catalunya, t’estimo!
Vilanova i la Geltrú.
José Manuel Polo
Una nadada a las boyas,
COMENTARIO -UN
CANT
A
LA
TERRA
(CATALUNYA T’ESTIMO) - Para leer el comentario completo accede a la web
Compuse Un cant a la terra en la casa familiar de Sant Feliú de Guixols a principios
de septiembre de 2015, después de haber
dedicado mucho tiempo aquel verano a leer
y escuchar opiniones de periodistas, historiadores, políticos (Carme Forcadell dio
un mitin en el pueblo a finales de agosto
cuando aún era presidenta de la ANC) pero
sobre todo me interesé por la postura de mi
familia catalana, con la que jamás habíamos
hablado ninguno del tema. Me prometí a
mí mismo dar total credibilidad a todo lo
que dijeran pese a que su visión fuese parcial y estuviera más influida por los medios
(a los que cada vez doy menos crédito en
éste y otros asuntos) que por la propia percepción y vivencia. Lo que encontré fueron
esencialmente reticencias, creo que debido
a su deferencia hacia nosotros y a su propia confusión acerca de cuál sería la mejor
opción para su propia tierra. De esa forma
comencé a escribir pensando en la multitudinaria manifestación que tendría lugar en
Barcelona el día 11 de ese mes.
Muchas veces cuando escucho las proclamas de la Diada tengo la impresión de que
realmente se quiere volver a 1714, que los
trescientos años de Historia que nos separan podrían borrarse de un plumazo y entonces, todo volvería a ser bueno, alegre y
próspero. El mal no proviene de la Dictadura franquista ni de la Guerra Civil, ni de
la de Independencia, tampoco de las uniones matrimoniales de Isabel y Fernando
o de Petronila y Ramón Berenguer. Todo
viene de ese día y el periodo que nos separa
ha sido uniformemente negativo, sin un día
de Sol para una Catalunya postrada, bajo la
implacable ley de Castilla. Parece como si
los barceloneses que murieron en la batalla
volviesen a ser tangibles, y se encarnasen en
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los peatones que recorren la Meridiana en
vaqueros y deportivas agitando las banderas fabricadas en China.
Las cinco primeras estrofas buscan expresar estas ideas y el enésimo renacimiento
del Catalanismo, más político que nunca.
Hay varias referencias al himno catalán de
Els Segadors, oficial de la autonomía desde
1993. También hay sendas alusiones a la
estelada y a los Països Catalans. La omnipresente bandera ideada a comienzos del
siglo XX añadiendo a una senyera el triángulo con la estrella de los modelos cubano
y portorriqueño, por lo que la podemos
considerar una enseña “estrellada”. La exagerada presencia de la bandera allá donde
estuviera me inquietaba y me recordaba a
otros tiempos de nacionalismo exacerbado
que no acabaron precisamente bien.
La segunda parte del Cant está ded icada
a mi Catalunya, mi visión de esa tierra tan
cercana, que para mí siempre significó vacaciones y familia. Porque ¿es que sólo existe
una Catalunya? Este es uno de los defectos
básicos a la hora de abordar cualquier debate ¡Hay tantas Cataluñas como catalanes y
forasteros tengan en mente! Por mucho que
busquemos realidades sólidas y concretas,
como cualquier país/región no deja de ser
un producto humano, artificial, una idea.
Fui el primer nieto de mi abuela materna y
una buena parte de la familia de Barcelona
vino al hospital a Madrid. Esa fue mi primera Catalunya y hasta hoy mi más querida.
Hace pocos años me di cuenta de que era el
segundo lugar en el que más tiempo había
estado después de Madrid. Más allá de eso,
comencé a ser consciente de mis raíces y a
interesarme por las vidas e historias de mis
antepasados. De ahí en adelante señalo una
serie de lugares y hechos que son los que
componen mi experiencia catalana.
Sigo con un alegato que puede parecer
político, pero que es ante todo emocional
¡Quédate! No somos tan diferentes, somos familia, eres una parte de mi hogar. Pero la última reflexión, a la que llegué
hace tiempo, es para mí la más importante.
Todo el poema es en sí mismo una carta de amor, una declaración. Si amas a
alguien de verdad lo haces sin condiciones, aceptando también la parte que no
te gusta. Lo mismo ocurre con esta tierra.
Para que mi canto sea verdadero no puedo
limitarme a una idea sino a la tierra, su gente, su lengua y su cultura. Una frontera no
me va a decir nada, nunca existirá para mí.
José Manuel Polo,
estudiante de Historia (UCM)