Ruido.pdf Oct. 2014 | Page 439

letras que toman múltiples sentidos, pero que siguen teniendo anclajes en los entornos. Estos dos bloques de letras en canciones nos enfrentan al proceso de composición. Lo primero que valdría la pena decir es que no hay un orden imperante a la hora de componer entre letras y músicas, pero sí se pueden detectar varias formas de hacerlo. En una primera forma están los músicos que inician una canción desde una letra. La segunda tiene que ver con bandas que todo lo inician desde la música. Casi siempre encontramos allí músicos con bastante experiencia (empírica o académica) que usan las letras como un instrumento musical más. Aunque les preocupa que estas tengan un sentido y hablen de algo, estos son factores secundarios frente al proceso de composición. En suma, una composición parte de unos acordes, riffs, melodías que se van construyendo entre varios músicos y de ahí se buscan las palabras y frases que puedan acompañarlas. De este modo, lo interesante es que se extiende el idioma, se tensionan los significantes y las palabras pasan a ser subordinadas por la música, por el devenir de unos sonidos. Aquí es donde entran en juego los conceptos metanarrativos, donde toman forma las composiciones que se construyen hilando sensaciones que no alcanzan a ser capturadas por el lenguaje. La tercera forma de componer que se identifica, y que puede ser a veces más escasa, es cuando las bandas llevan esta dialéctica entre música y letra de manera aleatoria, o a veces en paralelo. Lo que hemos notado en este tipo de agrupaciones es que hay un proceso de composición en conjunto que, más allá de la importancia de la letra o la música, pone el foco en el encuentro entre los músicos, que buscan sonidos y letras compartidos. Esto es algo que nos muestra la importancia del ensayo, pues allí no sólo se repiten canciones y se afinan sonidos, sino que también se da el proceso de composición: alguien inicia un acorde, otro lo sigue, la batería agrega algunos sonidos, otro propone tarareos que devienen palabras, y entre prueba y error se van construyendo canciones en grupo. Ni la música ni las letras son subestimadas en esta forma de componer; tampoco que se cree en una musa creadora que llega de repente a un ensayo, pero sí hay una disciplina de encontrarse para buscar, hasta que la canción lle v