Ruido.pdf Oct. 2014 | Page 335

Encontrarse los músicos Tratar de definir a los músicos que nos encontramos en Medellín es comprender su fortaleza y su fragilidad, la forma que lo extremo obtiene en la acción y la introspección con la violencia, esa pulsión creativa que es rasgadura y que está mezclada con dolores y rabias. Nos encontramos con personas altamente frágiles, pero con una inteligencia que en muchísimos casos les ha permitido construir un mundo donde ser fuertes; casos en los que la fortaleza se ha impuesto para inventarse una vida en la que su fragilidad no entre en contacto con un mundo que no la cuida. Se trata también de entusiasmos muy intensos y angustias inacabables, una violencia en la creación o en la expresión con la que finalmente hieren el aire, dañan algo que no tendría que estar ahí, que podría ser de un futuro ya pensado. Y para no tener que fundar –y así poder mantener su compromiso con lo inútil y lo efímero– los músicos fecundan espíritus o siembran árboles en el líquido con el que está hecha la noche. 335