ARIES.- Incondicional
Muestra su afecta a
empujones. De pequeño es
el mejor compañero de
juegos y durante la
adolescencia se vuelve
extremadamente agresivo. Pero ya
adulto, será capaz de hacer cualquier
cosa por ayudarnos.
Muy activo y poco dado al estudio,
prefiere aprender por su propia
cuenta.
Se llevará muy bien con otro hermano
que no sea intelectual o del tipo
sedentario, y que comparta con él su
tendencia a la acción, al movimiento
permanente y a la aventura.
TAURO.- No presta nada
Es adorable. Dócil y
amable, estará siempre
dispuesto a prestar oído a
las penas de amor y
responder con consejos atinados.
Si no sabe qué ropa ponerse, no
cometa el error de tomar su ropa
prestada y menos sin avisarle. En
realidad, lo mejor será no pedirle nada
en préstamo, mucho menos dinero,
porque le cuesta compartir sus
pertenencias.
Salvo que le ofrezca a cambio algo
para que se sienta reconfortado.
GÉMINIS.- El más
divertido de la familia
Durante toda la vida lo
hará reír con sus
ocurrencias, su incesante
parloteo y su original forma de ver la
vida. Siempre le cubrirá las espaldas,
ya sea frente a sus padres o ante la
adversidad. Sabe compartir y no es
celoso.
Si le encomiendan cuidar a sus otros
hermanos, los dejará ir y venir sin
objeciones, porque no cree en las
limitaciones o prohibiciones.
Para él o ella la libertad propia y
ajena es el estado esencial del ser.
CANCER.- Celoso, pero
protector
Sobreprotector, nunca
podría liberarse de él o
de ella, porque jamás
dejará de interesarse por todo lo que le
suceda. Sensible y muy dependiente de
los padres, se siente celoso de sus
hermanos a quienes a la vez adora.
Si alguien intentara lastimarlo, sería
capaz de sacar fuerzas de su debilidad
y salir a defenderlo con uñas y dientes.
Su familia es sagrada. Es el sostén
anímico y espiritual de ella y cada uno
de sus integrantes sabe que contará
siempre con él.