Revista UNADiccion Noviembre 2014 | Page 17

El miedo te invadió y te llevó a cometer errores. Y ahora, estás en lo correcto, esta es un carta de reclamo, porque los ¡te extraño! y los ¡te amo! se han cansado de buscarte sin tener respuesta y ya no me queda cariño que pueda ofrecerte, todo lo has matado, fueron tantos intentos por salvarlo y todo ahora está arruinado. Porque ya se fue tu niña de la sonrisa infinita, se cansó de esperar a ese que se decía ser su protector eterno, porque le dio la espalda y la llenó de miedo. Porque no ves más vida en mis ojos, ni veo yo más consuelo en tus brazos. Así que hoy te digo adiós, a ti y a la estúpida esperanza de volver a verte, te digo adiós y miro al mundo de frente. Midzuiro