Revista UNADiccion Enero 2015 | Page 16

Pasionarte La pasión convertida en tinta. Por: Tere Mancera El tantra es conocido como una práctica que permite expandir la conciencia a través de la liberación y canalización de la energía. Es una doctrina que se ocupa del estudio, aplicación y desarrollo consciente de los 108 tipos diferentes de energías fundamentales que se manifiestan en el ser humano y se canalizan a un estado de evolución. El tantra puede ser de gran ayuda para mejorar tu relación de pareja. El sexo tántrico busca la unión física y espiritual de los amantes retrasando el orgasmo lo más posible para llegar a el de una manera más placentera. Entre sus múltiples beneficios se encuentran:     Producción de serotonina. Regulación de las hormonas. Reducción del estrés. Control de la eyaculación femenina y masculina. Algunas de las recomendaciones para practicar el sexo trantico son los siguientes:  Contar con un espacio privado, agradable a ambos: temperatura adecuada, música, sabanas limpias y suaves, aromas y algunos alimentos para degustar (bebidas y bocadillos).  Acondicionar el cuerpo y mente: limpieza, tranquilidad, estar abierto a lo nuevo, al o desconocido.  Dedicar tiempo suficiente a los juegos eróticos previos, disfrutar a la pareja con los ojos abiertos, observar cada rincón de su cuerpo desnudo y apreciar la respuesta a cada uno de los estímulos: caricias, besos…  Armonizar las respiraciones para lograr la sincronización entre ambos, una respiración consciente y profunda es la adecuada.  Entregarse al acto sexual experimentando las diversas posiciones sexuales existentes balanceando así la energía femenina y masculina. Cada pareja es distinta por lo que debe intentar instaurar sus propios rituales eróticos. Lo anterior se engloba en algunas técnicas específicas del Tantra que corresponden a estos momentos: Mula Bandha, Masaje del Ligam y del Masaje Yoni y Del Maithuna. Este tema es demasiado amplio así que te invito a que investigues más sobre él, haz de tus encuentros sexuales un estallido de energía generado por el goce compartido, por la unión física y espiritual con tu pareja que te conduce a un estado de armonía, de placer y porque no decirlo, de divinidad.