me contó que despertando encontró en sus manos un panfleto de esos que te dan en la iglesia o los que
pasan a dejar a las casas, que decía –Yo soy Jesús y jamás te abandoné, ven a mí y yo te reconfortaré-, dice
que se echó a llorar amargamente por la tontería que iba hacer, le pidió disculpas a Dios y continuó con su
matrimonio, nada mejoró obviamente, pero día a día ella le pedía a Dios, aléjalo de mí, haz que se vaya, no
lo mates señor, pero has que termine mi cruz.
Por increíble que parezca 7 años más tarde, un día estaba arreglándose frente al espejo y escuchó como
Dios le habló detrás de ella, -Martha hoy tu esposo te va abandonar- y ella pegó un grito entre la impresión
y el miedo, porque ser una mujer dejada en esa época era lo peor, entonces Dios le dijo, -¿Martha no era
eso lo que querías?-, entonces reaccionó se puso muy feliz francamente no lo podía creer, entonces
pasaron dos días y efectivamente Carlos no aparecía, y sus hijos le pedían, -mamá que no vamos a salir a
buscar a mi papá- ella me contó que estaba tan feliz, pero no podía demostrar esa felicidad ante sus tres
hijos, entonces lo buscó en el trabajo, con sus amigos y con su familia, un amigo al que llamó le dijo -Martha
me da mucha pena decirte esto pero él se ha ido está bien pero no sé cuándo vuelva-, entonces ella les dijo
a sus hijos que su papá había salido a buscar un trabajo que pronto regresaría. Una semana más tarde
Carlos llamó, dijo –Martha espero te haya servido la lección tienes dos opciones regreso a la casa y haces las
cosas bien o nos separamos- a lo que ella contestó -Si vuelves van a cambiar muchas cosas, me vas a
respetar frente a mis hijos, vas a ser más agradecido- y el solo contestó entonces nos separaremos.
Martha aunque feliz porque Dios la ayudó a alejar a ese monstruo de su vida, pasó momentos difíciles
llenos de pobreza y mucho trabajo para sacar adelante a sus hijos, pero hoy en día Martha está casada con
un gran hombre al que tengo el honor de conocer, que la ama, la respeta y la apoya en todo.
Por eso de todo corazón no deseo que inicien el año pensando que las fiestas de navidad y año nuevo son
para la glotonería, no es beber, no es dar costosos regalos, es algo más profundo, es el nacimiento de
alguien muy sabio que vino a enseñarnos la ley universal, si amas, respetas, no dañas, no robas, perdonas,
ayudas, etc., y no solo en Diciembre es todo el año, tienes que despertar y hacer lo correcto.
¡Feliz Año Nuevo! Y que sus metas se cumplan.
Anónimo.