Travesías didácticas Nº 27 • Abril 2018 | Page 43

El maestro anota en el pizarrón todas las preguntas que surgen. Brandon- ¿Por qué respiramos? Thiago- ¿Por qué las cabras están preñadas? Sofía- ¿Quién hizo la escuela? Facundo- ¿Por qué llueve? Guadalupe- ¿Dónde vivimos antes de nacer? Celeste- ¿Por qué todos somos humanos? Emiliano- ¿Quién hizo las nubes? Etc. Luego leímos las preguntas, que fueron cerca de cuarenta, ellos dijeron -empecemos a responder- asique se les propuso que eligieran la que consideraban más importantes. Se volvió a leerlas y se propuso que mientras se buscaba un vaso de agua, ellos decidieran sobre qué pregunta conversar. Al regresar, en menos de cinco minutos, ya habían elegido la pregunta de Celeste, ¿por qué todos somos humanos? Lo planificado era que siguiéramos preguntando sobre el tema de por qué todos somos humanos, entonces se planteó la importancia de determinar quiénes son esos todos, a lo que Celeste respondió-nosotros- Entonces pregunté- ¿los de este grado? No-dijo Celeste- nosotros los humanos. Quedó claro que la niña tenía incorporado el concepto de humano. Entonces era un aprendizaje previo que permitió dar pie a lo que sin saber, vendría luego, (pero que tuvo lugar gracias a la consciente apertura que para llevar a cabo estas actividades cuyos espacios sí son planificados) un sin fin de aprendizajes mutuos, compartidos, inesperados, significativos, que darían pie a otro montón de posibilidades que ellos, los niños, habían desenrollado de un ovillo infinito de conceptos previos y nuevos, que aumentaban sus posibilidades comunicativas en cuanto aumentaban su repertorio léxico. Luego la propuesta planificada tomó otro rumbo, ya que la idea era que ellos siguieran elaborando preguntas referidas a la duda germinal, ¿Por qué todos somos humanos? pero insistieron en la elaboración de hipótesis sobre la pregunta. Las hipótesis fueron las siguientes: 1. Por qué nacemos de la mamá. 2. Por qué tenemos manos y piernas. 3. Por qué respiramos. 4. Por qué vamos a la escuela. 5. Por qué comemos. 6. Por qué caminamos en dos patas. 41