Travesías Didácticas Nº 22 • Julio / Agosto 2016 | Page 24

Diálogos educativos: dialogando con los niños

Prof. Stella Mary Figueroa

Dialogar con los niños implica que, como docentes
de educación inicial, hagamos un alto en la tarea
cotidiana y miremos a nuestros niños. Esa infancia
que nos prestan, para sentirlos y sentirnos. Considerar
nuestra propia infancia para mirar la de nuestros alumnos,
nos vincula con ellos de una forma diferente. Comenzaremos
así, a “dialogar” con ese niño que fuimos. Establecer este
diálogo es un desafío que facilitará la enseñanza y por
ende las huellas que dejamos en nuestros alumnos.

Momentos de diálogos.
En la actualidad es preciso habilitar espacios y tiempos de diálogos. Diálogo puede definirse
como: la forma oral o escrita en la que se comunican dos o más personas en un intercambio
de información. También un diálogo describe a una conversación entre dos o más individuos,
que exponen sus ideas o afectos de modo alternativo para intercambiar posturas. En ese
sentido, un diálogo es también una discusión o contacto que surge con el propósito de lograr
un acuerdo.
Dialogar con otros es muy bueno, sin embargo, dialogar con nosotros mismos es más
complicado. Entrar en discusión con el niño o niña que llevamos es mucho más difícil que
hablar con otro presente. Debemos centrar un debate importante con la infancia actual, para
re-conocerla y bucear en la nuestra rescatando así, aspectos que nos hicieron felices o no,
porque en la medida en que logremos establecer este contacto podremos visualizar algunos
espacios que nos permitan trazar valiosas estrategias de enseñanza.
¿Y por qué es necesario hoy traer al diálogo en el escenario educativo? Porque estamos
transitando un mundo “muy comunicado” y a la vez sin comunicación. Estamos en la
contradicción cotidiana de poder conocer, “hablar”, establecer contactos con amigos de otros
lugares, en fin, hoy, con un botón llegamos a dar una vuelta por el mundo. Los niños parecen
haber nacido con un celular en la mano, ya casi no asombra entrar a un lugar y ver los nenes
con una tablet que hábilmente manejan. Sobre este aspecto Inés Dussel expresa: “…Otro

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