Revista SICES Primer Edición | Page 82

la segunda capa, cada capa de un número poligonal centrado k-gonal contiene k puntos más que la capa anterior (Sloane & Plouffe, 1995). La espiral hexagonal y la espiral de Ulam se pueden describir con la distribución de puntos de figuras poligonales descritas por la definición previa. Se aclara que en el caso de la espiral de Ulam el polígono co- rrespondiente debería ser un octágono y no un cuadrado, por ello se ha investigado una base, la cual se define aquí como la cantidad de enteros que rodean al centro en la prime- ra capa o vuelta de la espiral, y esta puede corresponder al mismo número de lados en la estructura general de la espiral, pero es inmediata a la cantidad sectores triangulares dentro de una espiral (figura 5). Solamente se han estudiado las características en co- mún de aquellas espirales que pueden ser orientadas bajo números poligonales cen- trados. En el caso de la espiral de Sack, no hay relación con ningún número poligonal centrado. FIGURA 5 Repartición uniforme de los enteros o posiciones, represen- tadas por círculos, en sectores triangulares. En el caso de la espiral hexagonal existen 6 sectores, mientras que en la espiral de Ulam se descubren 8 sectores. D. Ecuaciones Los números poligonales centrados están ligados a los números triangulares, trabajan por niveles en lugar de capas. Un número triangular puede ordenarse en la forma de un triángulo equilátero si se transforma en pun- tos iguales a su valor (Figura 6). El n-ésimo número k-gonal centrado puede obtenerse por la colocación de k números triangulares alrededor del punto central; por lo tanto, el n-ésimo número k-gonal centrado puede expresarse9 matemáticamente por: C k,n = (kn/2)(n - 1) + 1 FIGURA 6 Ecuación para determinar el número triangular (Tn), este nú- mero corresponde a la cantidad de posiciones contenidas en un sector. Donde n es el nivel. Nótese que se agrega k a la ecuación del nú- mero triangular, se suma al final 1, y dentro del paréntesis la suma pasa a ser una res- ta, este último cambio debido a que toma en cuenta el origen como el primer nivel para los números poligonales. No obstante, se prefie- re contar los niveles o capas después del ori- gen, de modo que los niveles en la espiral correspondan a los niveles en la fórmula de los números triangulares. Esto per-mite em- plear otra fórmula en la cual basta multiplicar la base de la espiral por el nivel del número triangular que interese, determinando así la cantidad total de posiciones en un nivel den- tro de la espiral sin contar su centro (Figura 7). Lo cual resulta mejor dado que se inicia un conteo de 0 y no de 1 por lo explicado al momento de seleccionar un punto de partida. Además de la columna con números rojos (Figura 7), se encuentran otras filas del cen- tro a las esquinas de la espiral, en donde los números están marcados con tonos azules y naranjas. Esos números marcados, y no los grises, pueden ser calculados con el número triangular y operaciones adicionales que to- man en cuenta a los sectores. Para verificar el entero que va contenido en una ubicación situada en las filas que van del centro a uno de los bordes en la espiral, primero se calcu- la el número triangular del nivel en donde se encuentra el entero. Posteriormente se de- termina cuántos sectores separan a ese en- tero de la posición final. Por último, al entero que finaliza el nivel se le resta el producto, que resulta de multiplicar el nivel con la can- tidad de sectores que lo separan del entero cuyo valor se esté verificando.