tienen la facultad de cerrar un establecimien-
to de manera temporal hasta nuevo aviso,
aunque no pueden generar un cambio brus-
co ni privar a la sociedad de un beneficio a
la salud.
Guía de observación
Se evaluaron aspectos que garantizan un
ambiente laboral seguro para el personal
ocupacionalmente expuesto, el paciente y
las personas en áreas circundantes. Los
elementos involucrados en las instalaciones
fueron: blindaje en paredes, puertas, ven-
tanas y cuartos de control según aplique;
otros elementos evaluados fueron: alarmas
audibles y visibles, símbolos trisectores, ac-
cesorios de protección radiológica (protector
de tiroides, chalecos de plomo, guantes y
gafas plomadas, mamparas), dosímetros de
área y dosimetría personal. Se encontró li-
mitaciones en cuanto a la valoración de las
instalaciones, debido a que se basó en las
características físicas observadas como el
peso de las puertas plomadas, el color del
vidrio plomado o el grosor de las paredes sin
contar con otra forma de comprobarlo más
que lo observado y los comentarios del guía
o guías durante la visita; en el caso de que
ambas (lo observado y hablado) carecieran
de sentido lógico, la información recibida se
descartó por incongruencia.
En las instituciones de salud pública (4/8),
tres de los aspectos evaluados obtuvieron un
porcentaje por encima del 50 % (Gráfico 1).
El 88 % de las instalaciones de los servicios
de radiología de las cuatro instituciones se
consideran aceptables, cumpliendo con lo
mínimo requerido (blindaje del área y cuar-
tos de control) en un entorno donde se ma-
nipulan radiaciones ionizantes. Sin embargo,
ninguno de los hospitales contaba con mo-
nitoreo de dosis en el área. Esto representa
inseguridad con respecto a la efectividad del
blindaje, ya que no hay evidencia ni certifica-
ción de que las dosis en el entorno son consi-
deradas aceptables para el personal y el pú-
blico. En la mayoría de las áreas evaluadas
de las instituciones se cuenta con accesorios
de protección adecuados para el personal
ocupacionalmente expuesto (gráfico 1).
En los hospitales privados (4/8), el 84 % de
las instalaciones cumplen con las normativas
sugeridas por organismos como la Comisión
Internacional de Protección Radiológica
(ICRP) y la Agencia Internacional de Energía
Atómica (IAEA). El 50% de las instituciones
evaluadas en el sector privado (2/4) cumplen
con el monitoreo de las áreas, asegurándo-
se de la efectividad del blindaje (gráfico 2).
Refleja el porcentaje de cumplimiento to-
mando en cuenta cada uno los elementos
anteriormente mencionados (gráfico 1 y 2)
por todas áreas de radiodiagnóstico. El por-
centaje obtenido para instituciones públicas
y privadas fue similar (68.8% y 68.9%). Una
de las instituciones privadas contaba única-
mente con un servicio de radiodiagnóstico
obteniendo un porcentaje bajo por falta de
señalización en esa área, lo que significó un
68.8% para las instituciones privadas.
GRÁFICO 1
Cumplimiento de aspectos evaluados en las instituciones de
salud pública.
Instalaciones
88%
Alarmas audibles
y visibles
60%
Accesorios de
protección 89%
0%
Monitoreo de
áreas
29%
Símbolo Trisector
GRÁFICO 2
Cumplimiento de aspectos evaluados en las instituciones de
salud privadas.
Instalaciones
84%
Alarmas audibles
y visibles
45%
Accesorios de
protección 95%
50%
Monitoreo de
áreas
50%
Símbolo Trisector
En el servicio de radioterapia se encontra-
ron mejores resultados en el sector público
que cumplió en un 100% con las normativas
evaluadas; y el sector privado en 83% con el