Revista Scientific Volumen 2 / Nº 5 - Agosto-Octubre 2017 | Page 43

Carol del Carmen Terán González, Edith Perdomo de Vieras, Roexana Andreina Castillo Vázquez. Un Recorrido por el Pensamiento Educativo hacia la Transformación de la Educación en el Siglo XXI. Creando una crisis de identidad y fortaleciendo la cultura de afuera que tanto aman nuestros niños, niñas y jóvenes. La historia integral de los pueblos latinoamericanos es fuente primordial dentro de la vertiente educativa, es la memoria y las páginas del pasado las que van a permitir al hombre encontrarse consigo mismo y encontrarse con los demás en colectivo, los valores históricos como lo dice Don Mario son los que hacen a los pueblos, son los que crean el presente, sin pasado no hay futuro, así lo plantea en su discurso Briceño Iragorry “Puede decirse que el presente de los pueblos es apenas manera de puente o de calzada por donde es conducida la carga del futuro que gravita sobre nosotros como obra y representación del pasado” (1981: 65). Con estas palabras se muestra que, a la juventud será a la que se enseñe en las aulas, los mismos son los símbolos de expresión de lo que sus maestros le enseñan, ya que los elementos presentados por ellos le darán el perfil a su cultura e identidad. Prieto Figueroa, un insigne maestro afrodescendiente, instauró en la educación venezolana su idea de humanismo; planteando en la Ley Orgánica de Educación de 1948, así mismo muchos elementos de esta ley actual siguen teniendo los ideales del maestro; Figueroa también al igual que los pensadores anteriores menciona que la historia y la ilustración van de la mano, para él la formación tiene el compromiso de aproximar el futuro al presente; por ello, todo educador tiene que convertirse en un guía prospectivo para que pueda predecir las contrariedades y ocupe el cambio como una necesidad decisiva del sistema educativo, es importante señalar que para Prieto la enseñanza no es estática, es cambiante, dinamizadora y transformadora. Una sociedad dinámica, como lo es o debe serlo la sociedad democrática, la función de la educación no es sólo conservar los bienes y valores tradicionales, sino promover el cambio, propiciar el progreso […] En la vida democrática, el cambio es lo característico, y la educación debe preparar a las generaciones para adaptarse cada día a los cambios sucesivos, (Prieto, 2008: 21). Revista Scientific - Artículo Arbitrado - Registro nº: 295-14548 - pp. BA2016000002 - Vol. 2, Nº 5 - Agosto-Octubre 2017 - pág. 29/48 ISSN: 2542-2987 - ISNI: 0000 0004 6045 0361 42