Profundizar la vida social, permite visualizar la realidad que vivimos y el
dinamismo de transformación con niveles acelerados que nos dictan el
proceder de las conductas actuales de los pueblos y como la aculturación ha
creado modelos tergiversados del accionar ciudadano, presentado parámetro
diferentes de conducta y comportamientos. Cabe destacar, que la
transculturación, siempre ha tendido a colocar por encima la "cultura del otro",
como la que de alguna forma nos conecta con el mundo externo, y la escuela
como centro de formación debe no solo transmitir conocimientos pedagógicos
sino además crear una transformación social, cultural en valores y saberes de
identidad, integrando a la comunidad como fuente de sabiduría para
enriquecer la praxis pedagógica a través de estrategias de aprendizajes
dinámicas creando espacios abiertos donde se dé a conocer el patrimonio, los
saberes ancestrales y el quehacer cultural.
En definitiva, a modo de reflexión los valores son muy importantes para
la sociedad porque están presentes en todas las situaciones que vivimos a
diario, en todas las decisiones que tomamos y se adquieren sobre todo a
través de la práctica y del ejemplo; en ese diario convivir, compartir y expresan
nuestro sentir en un momento determinado. Esta allí palpable y debe ser
obligatorio que recuperemos la posibilidad de integrar a los actores sociales
para la transmisión de saberes y de esta forma innovar la construcción
curricular.
8. Referencias
Arias, F. (2006: 53). El Proyecto de Investigación. Guía para su elaboración.
Editorial Epísteme. Orial Ediciones. 5ta. Edición. Caracas.
Briceño, M. (1989: 305-306). Doctrina Historiográfica. Obras Completas, Vol.
4. Ediciones del Congreso de la República. Caracas.
316
Artículo Arbitrado
7. Conclusiones y reflexiones