Revista Scientific Volumen 2 / Nº 3 - Febrero-Abril 2017 | Page 83

a construir comportamientos que lleven a la transformación del ser en ese convivir en los diferentes contextos de su entorno social (Matos, 2000: 25). Desde aquí, radican los criterios y la práctica de valores en el que se identifica el individuo de estar en el mundo del grupo al que pertenece, afirmando una concepción de la humanidad. 3. Metodología Considerando el propósito del estudio, el mismo se abordó desde el paradigma cualitativo, el cual para Martínez (1989), consiste en descripciones detalladas de situaciones, eventos, personas, interacciones y comportamientos que son observables. Además, incorpora las expresiones de los participantes, sus experiencias, actitudes, creencias, pensamientos, reflexiones, tal como son expresados por ellos mismos. Partiendo de la necesidad de conocer desde las voces de los actores socio-educativos, el estudio se aborda desde una filosofía fenomenológica-hermenéutica procede a la búsqueda de la percepción y descripción de las experiencias de los sujetos y los significados de las mismas; por esta razón, la escogencia del método debe organizarse congruentemente con este enfoque para que evidencie la experiencia del objeto de estudio para buscar el sentido oculto y la esencia de los fenómenos. El método fenomenológico, parafraseando a Martínez (1999: 145), permite estudiar los fenómenos como son experimentados y percibidos por el hombre, permitiendo estudiar la realidad desde la naturaleza que sólo puede ser captada desde lo interno del sujeto, quien es el que las vive y la experimenta. Por tal razón, el asumir la postura epistemológica de este estudio desde la fenomenología parte del hecho que la realidad es construida desde los propios actores socio-educativos quienes expresan mediante la reflexión, la percepción que le dan a los valores sociales, considerando que desde la 83 Artículo Arbitrado establecen un modelo de conducta que es aceptable en la sociedad; y ayudan