Revista Scientific Edición Especial - Febrero-Abril 2017 | Page 74
Para la historia venezolana, la historia regional representa un desafío;
reto que abre puertas al estudio que se está generando en este boceto de
trabajo, por lo cual definir la historia local es de relevancia, ya que esta
concepción conforma el corpus teórico de la investigación; de allí que, para el
mismo se tome la definición planteada por Medina (2005: 78):
La Historia regional es aquella que nos remite al pasado de las
localidades, sean parroquias, barrios o urbanizaciones,
ofreciéndonos un panorama de las motivaciones, individuales
y colectivas, de un gran valor para el conocimiento, cultivo y
uso de la población en general. Un rasgo característico de este
tipo de historia es que se sirve de fuentes de tipo oral y,
particularmente, provenientes de las comunidades, lo cual le
confiere un contenido afectivo de gran valor por ser,
precisamente, la experiencia subjetiva de sus habitantes.
(Medina, 2005: 78).
La historia local fundamenta su definición en el descenso del nivel de
reflexión de lo macro a lo micro, de lo global a lo local, en problemáticas y
retos sociales que se asientan hacia el hombre y la mujer de carne y hueso,
hacia los seres humanos y sus planes, hacia la gente de casa y sus maneras
de pensar y de vivir. Es una historia que se sitúa al particular de las fronteras
del espacio recurrible de las personas (barrios, veredas, corregimientos y
municipios pequeños) y que converge con la memoria colectiva de la
comunidad y de los sujetos sencillos y comunes que la componen: una historia
que se sitúa en el universo inferior y microscópico de la sociedad, vivido por
habitantes reales.
Así también es preciso señalar que, la pequeña historia es parte
fundamental de la identidad del ser humano, por tanto, debe ser parte del
sujeto de aprendizaje; todo estudiante de educación básica, media y
73
Arbitrado
3.5. La historia regional