Revista Scientific Edición Especial - Febrero-Abril 2017 | Page 341

formal, sino también, a la educación de la calle, la familia, el trabajo, la iglesia, el deporte, entre otros, como instrumentos del aparato social que determina la común unidad de la vida. Por consiguiente, las estrategias didácticas, según Montilla (2015) expone que las estrategias didácticas “es el conjunto de procedimientos, apoyados en técnicas de enseñanza que tienen por objeto llevar a un buen término la acción didáctica, es decir; alcanzar los objetivos de aprendizaje” (pág. 71). Es decir, se hace referencia a una planificación en el proceso de enseñanza y aprendizaje, lo cual implica un conjunto de decisiones que el docente debe tomar de manera consciente y reflexiva, con relación a las técnicas y actividades que puede utilizar para llegar a las metas de su curso. De allí que, el objetivo real de las estrategias didácticas es generar cambios positivos, en el proceso de enseñanza-aprendizaje en los estudiantes, con la finalidad de evitar prácticas pedagógicas rutinarias que afecten a la educación venezolana y los cambios deben iniciarse de inmediato en las acciones que realicen los docentes en sus aulas. Solo así se podrá fortalecer la calidad de los aprendizajes, a base de las diferentes estrategias didácticas que constituyen un paso hacia delante en el mejoramiento de la formación del educando. En consecuencia, el docente es un profesional que debe poseer dominio de un saber especifico y complejo (el pedagógico), que comprende los procesos en que está inserto, que decide con niveles de autonomía sobre contenidos, métodos y técnicas, de acuerdo a la heterogeneidad de los estudiantes; organizando contextos de aprendizaje, interviniendo de distintas maneras para favorecer procesos de construcción de conocimientos desde las necesidades particulares de cada uno de sus estudiantes. Evidentemente, la misión del docente es contribuir al crecimiento de sus estudiantes. Asistir, desde los espacios estructurados para la enseñanza 340 Arbitrado significado, en el que se evidencia a la educación, pero no sólo a la educación