El primer paso es ser nuestra
prioridad numero uno.
Si buscamos nuestro bienestar, todo lo que
realicemos lo desempeñaremos de la mejor manera.
Por lo que empecemos a aplicar los siguientes pasos:
Incluye 1 a 2 piezas de fruta altas en fibra, con
cáscara todas las mañanas (como la manzana,
la cual contiene propiedades favorables para el
hígado). Los cítricos, tomate y aguacate son dos
buenas opciones para incluir a lo largo del día, ya que
promueven la producción de enzimas que actúan
en la desintoxicación y limpieza, gracias al
efecto diurético de eliminación de sustancias a
través de la orina.
1.
2.
Agrega vegetales a cada comida y cena,
principalmente espinacas, zanahoria, betabel,
espárragos, hojas verdes (acelgas, kale o col rizada),
vegetales crucíferos (brócoli, repollo, berros,
rábanos). Estos favorecen la regeneración
hepática, desintoxicación de metales pesados,
tóxinas del medio ambiente y carcinógenos.
Incluye una ¼ taza en algún snack o
3. Nueces.
como complemento de algún platillo. Gracias
al omega 3 que aporta, favorece una mejor
oxigenación y depuración del hígado.
Té de cúrcuma, diente de león, verde
e infusión de romero son bebidas
que favorecen la producción de bilis,
desinflaman y purifican el hígado y sus
conductos.
4.
Agua natural, la base de cualquier limpieza en el
organismo, ya que además de hidratarnos, purifica
y ayuda a eliminar impurezas.
5.
a disminuir el estrés e incluyamos
6. Empecemos
rutinas de meditación y ejercicio.
grasas saturadas y colesterol, alimentos
7. Evitar
altos en grasa, refritos, comida rápida y chatarra.
azúcar refinada proveniente de
8. Evitar
dulces, galletas, pasteles, refrescos, jugos
industrializados.
¡Empecemos con pequeños cambios que nos ayuden a
lograr increíbles resultados!
Por: Fernanda Encinas | Nutrióloga Vegana
[email protected]
(664) 518 0689
Fernanda Encinas, Nutriologa
FernandaEncinasNut