NOV/DIC 2017 | GuitarraMX | 29
Delay, ecos y derivados son repeticiones (ya sea una o varias), de la misma señal con una diferencia de tiempo determina, pueden usarse para lograr una percepción espacial determinada o bien como algo más artístico o musical. Algunos usos incluyen repeticiones que se pierden poco a poco en volumen y generan la sensación de estar tocando en algún lugar como El Gran Cañón, podemos usarlos además como repeticiones que rellenan los espacios con fines de completar un arreglo musical. Dentro de los parámetros comunes tenemos el Delay time o espacio de tiempo entre repeticiones. El Feedback o cantidad de repeticiones basándonos en porcentaje de intensidad de volumen que se reingresa al proceso.
En este tipo de procesos tenemos algunos variantes de modulación que incorporan osciladores, conocidos como LFO que hace que el tiempo sea variable y logra diferentes efectos como el Chorus y el Flanger, en donde la señal retardada se suma a la original generando la sensación de doblajes o filtros que cambian la frecuencia y la amplitud en el tiempo al jugar con el balance entre la señal original y la retardada. Dentro de los efectos de modulación tenemos otros que también utilizan osciladores y varían el volumen como es el caso del Tremolo.
Este tema es material para escribir un libro…”
Y dando pie a lo que le traeremos en la próxima edición, sobre filosofías del diseño, flujos de señal, cerramos la primera de dos partes con la siguiente cita:
“Hay que invertir lo mejor posible, cuidando cada detalle. No solo el instrumento, también las pastillas y todo componente que interactúe con la señal. Algo que muchos guitarristas pasan por alto: la calidad de los cables y conectores. Estos pueden hacer que el procesador más caro y la mejor guitarra suenen mal o simplemente no suenen.”