Revista Foro Ecuménico Social Número 7. 2010 | Page 96
Responsabilidad Empresaria
Por suerte
el proceso
de incorporar
principios éticos en
las grandes
organizaciones
ha comenzado.
114•FORO
fo: “ Esa responsabilidad (hablando de la
de todo gerente o conductor de empresas) es conducir los negocios de acuerdo
a los deseos de los accionistas o dueños,
que generalmente serán ganar la mayor
cantidad de dinero posible cumpliendo
al mismo tiempo con las reglas básicas
de la sociedad in corporadas tanto en el
derecho como en la ética” (That responsibility is to conduct the business in accordance with their desires, which generally will be to make as much money
as possible while conforming to
the basic rules of the society, both
those embodied in law and those
embodied in ethical custom).
Y éste es el gran aporte de la
RSE moderna, que es volver a
incorporar la ética dentro de las
obligaciones de una empresa u
organización. No basta con cumplir la ley y menos aún tratar de
eludirla “legalmente”con abogados ingeniosos. Este modelo de atenerse estrictamente a la letra de la ley escrita es
lo que llamo una visión positivista/racionalista del derecho. O sea, es quitarle
al derecho todo contenido valorativo o
ético e interpretar literalmente las normas jurídicas como si no hubiera nada
más allá de ellas.
El gran jurista Hans Kelsen, que
contribuyó notablemente al análisis filosófico del derecho, tuvo gran influencia
desde 1934 con este enfoque positivista.
Bajo este paradigma, toda organización
-sea el Estado o sea una empresa- puede
describirse por sus reglas o normas positivas. Kelsen llegó a decir: “El Estado
es el Derecho y el Derecho es el Estado”. Este modelo positivista prevaleció
durante muchas décadas en nuestro país
en la formación de varias generaciones
de abogados.
Sin embargo, el derecho en una sociedad intenta reflejar y preservar los
valores de esa sociedad, por lo cual en
la vida cotidiana no se puede separar el
derecho de esos valores. Es decir no se
puede interpretar el derecho positivo sin
considerar los valores y principios implícitos en toda norma jurídica. Si los gobernantes y empresarios solo ven y cumplen las normas explicitadas del sistema,
o sea las normas positivas, estarán recortando la realidad en forma peligrosa y
van a dar respuestas incompletas o falsas a la sociedad frente a la cual tienen
responsabilidades mayores que el común de la gente. Esta conducta miope
del positivismo, al no incorporar principios éticos en la interpretación de la ley
y en las decisiones, pone en peligro la
sostenibilidad en el largo plazo de toda
organización.
Hay muchas formas de definir y entender la ética, pero una tal vez apropiada para nuestro tema de la RSE es decir
que: “La ética es el conjunto de valores,
principios y conductas coherentes que
permiten a las organizaciones humanas
su subsistencia en el largo plazo”.
Por suerte el proceso de incorporar
principios éticos en las grandes organizaciones ha comenzado y los esquemas
reduccionistas de abogados positivistas
y de economistas “puros” están dejando
paso a visiones más complejas y ricas, en
las que se incorporan la ética, las instituciones, y la sostenibilidad como elementos importantes.
Es necesario insistir en que esta necesidad de incorporar principios éticos
a las conductas empresarias no obedece a una actitud altruista o idealista de
las empresas sino a causas de estricta supervivencia. De esto se han dado cuenta
antes que otras las empresas de recursos
naturales que tienen que planear a largo
plazo, y sus proyectos son generalmente en lugares donde el Estado no está
presente.