Revista Foro Ecuménico Social Número 10. 2013 | Page 42
Crisis ética y economía
Hoy las políticas,
los políticos, los
empresarios y también
organizaciones varias
están bajo este
fenómeno de
cortoplacismo. Porque
si el futuro es una
amenaza lo que
tengo que hacer
racionalmente
es maximizar el bien
presente.
60• FORO
año 1974. Publicó un paper muy int eresante titulado “La paradoja de la felicidad”, en ingles “the happiness paradox”. Dijo que no hay una relación entre
el aumento del producto por capita y el
aumento del indicador de felicidad pública. La curva es así como una parábola. Un nivel de producto por capita, un
aumento del producto, va a disminuir la
felicidad pública. Este es un hecho que
esta estadísticamente probado en todos
los países de mundo; la Argentina también. Hay indicadores objetivos y otros
subjetivos; un indicador objetivo por ejemplo es la tasa de
suicidios ¿Por qué las personas se suicidan? no porque sean
pobres; los pobres no se suicidan
nunca, porque tienen la confianza
en la esperanza que el futuro será mejor
que el presente. Los que se suicidan es
porque no tienen una razón para vivir,
que no es la misma cosa que la pobreza;
esta es una consecuencia del individualismo libertario.
Vamos a considerar las tres causas
que he indicado: globalización, tercera revolución industrial, y la cultura del
individualismo libertario (tenemos que
calificarlo como individualismo libertario porque hay otros tipos de individualismo). El conjunto de las tres causas ha determinado un fenómeno que
es muy conocido hoy en todo el mundo: el de la incertidumbre radical, que
significa que el futuro no es perseguido
como una oportunidad, sino más como
una amenaza.
Yo que soy viejo, recuerdo cuando
era joven no sabía qué podía pasar en mi
futuro, pero tuve la certidumbre que el
futuro tendría que ser mejor que el presente. Hoy los jóvenes no reaccionan
así. Tienen miedo del futuro, porque el
futuro es perseguido como una amenaza, no como una oportunidad de vida.
Este sentido se produce también al
final en las empresas, no solo en las personas; es también la idea de hablar del
cortoplacismo. Hoy las políticas, los políticos, los empresarios y también organizaciones varias están bajo este fenómeno de cortoplacismo. Porque si el futuro
es una amenaza lo que tengo que hacer
racionalmente es maximizar el bien presente. Para eso no me preocupo si mañana voy a destruir el medio ambiente, voy
a destruir otros valores, porque no tengo
la posibilidad de percibir el futuro como
una oportunidad.
El cortoplacismo nunca había existido, como vemos si leemos los libros
de los empresarios famosos del pasado,
en Italia un hombre como Olivetti, en
los Estados Unidos un hombre como
Henry Ford, entre muchos otros, y también en la Argentina. En los libros dicen:
mi empresa tiene que durar para siempre; yo voy a desaparecer, voy a morir,
pero después de mi hay otras personas.
La idea de la empresa como institución
que tiene que durar, hoy no es la misma
cosa. es lo contrario; hoy muchas empresas tienen que maximizar ganancias de
corto plazo, aunque saben que de esta
manera en el futuro se va a destruir la
empresa misma.
¿Cuáles son las consecuencias de
estos tipos de análisis muy sintéticos,
cómo poder pensar las empresas o las
organizaciones civiles? No es suficiente
que estas organizaciones se preocupen
por denunciar lo que no va bien. Tienen
la nueva responsabilidad de convertirse en empresarios sociales; no basta ser
operadores sociales. Es necesario, pero
no es suficiente.
El empresario social significa personas que se comportan con una lógica como los empresarios normales. Pero
tienen una finalidad diferente, que es la
finalidad de producir bien común de una