Revista Foro Ecuménico Social Número 10. 2013 | Page 22

Diálogo Intercultural El hecho de haber leído tanto del budismo, lo llevó a adoptar parte de esa filosofía, y también del sintoísmo. Que en realidad es una especie de animismo. Dios es el todo y es la nada. su ser intimo. Lo que sí le gustaba a veces era jugar con la idea de la reencarnación, porque estaba dentro del principio de la materia, que todo vuelve, que todo se transforma, y esto le divertía, pero otras veces me decía: “Bueno, este mundo María, es una cosa tan extraña, que el cielo, Dios,pueden ser posibles también.” Es decir tenía siempre una actitud de duda, y no de negar o afirmar que algo existe o no. Cuando estaba muy grave, le pregunte si no quería charlar con una persona preparada en religión, por ejemplo un teólogo al que pudiera preguntarle lo que quisiera. Entonces me dijo: “Bueno, si a usted la va a dejar tranquila, hagamos una cosa, que venga un sacerdote católico, y por mi abuela que venga alguien calvinista de la Iglesia de Ginebra. Y entonces así usted se quedará tranquila”. Le respondí que no era por mi tranquilidad. Me contestó: “Si, total mal no me va a hacer”. Pasó dos largas tardes charlando con ambos ministros en una actitud de diálogo abierto. Murió tran­quilo, trabajando, en su ley. ¿Borges vivió la idea de un juicio final? ¿tenía sentimiento de culpa? Más que sentimiento de culpa, sentía que la vida le hacía regalos inmerecidos. Era humilde y modesto en todos los sentidos. Por eso creo que no tenía fuerte sentimiento de culpa. El único que recuerdo que me manifestó, fue a los pocos días que murió su madre y que expresó en su poema que se llama “Remordimiento”: se reprochaba no haber disimulado que las operaciones en sus ojos no mejoraban su visión, y que no le hubiera costado nada inventar mejorías. El hecho de haber leído tanto del budismo, lo llevó a adoptar parte de esa 40• FORO filosofía, y también del sintoísmo. Que en realidad es una especie de animismo. Dios es el todo y es la nada. La nada para ellos, es diferente de lo que es la nada para nosotros, entonces nosotros somos parte de esa nada, y esto lo ayudó a que Borges enfrentara la muerte con esa entereza. Una de las diferencias que hay entre Oriente y Occidente es que en Occidente la idea del yo es muy fuerte, de allí la gran corriente psicoanalítica, y de que tantas personas estén todo el tiempo hablando de ese yo. En ese contexto, el aniquilamiento del yo es una cosa terrible. En cambio en Oriente, el yo no existe,uno es parte del todo y no está el tabú de la muerte como en Occidente. Esa cosa tan terrible. En cambio en Oriente uno llegará a ser nada, que no es terrible, porque es como la divinidad que está en todas las cosas. Recuerdo por ejemplo mi experiencia cuando era muy chica; descubrí que iba a morir, le pregunté a mi abuela y ella comprendió que yo había perdido parte de mi inocencia al hacerle esa pregunta. Se dedicó a hablarme sobre el Infierno, sobre los pecados, a mostrarme vidas de santos con tormentos terribles, y yo estaba horrorizada. Y le dije cuándo iba a morirme. Contestó que Dios es el poder sobrenatural y que El tiene esa fecha que no podes saber ni vos ni nadie. En cambio cuando hablé con mi padre, cuando también era muy chica -tenía cuatro años-, él me aclaró que las fechas no existen, que las fechas son una creación de los hombres. El tiempo es un todo. Es todo. Lo fraccionan los hombres para tener punto de referencia, y que morir es como dormir. Me preguntó: ¿Usted siente algo cuando se duerme?, le respondí que sí, que a veces tengo pesadillas. Me respondió que la muerte tiene la ventaja de que no iba