Revista Foro Ecuménico Social Número 10. 2013 | Page 19
Diálogo Intercultural
vive con su perturbadora miseria, tolerada por el Dios que ellos mismos invocan
con tanta piedad:
Allí en Rangoon comprendí que los dioses
eran tan enemigos como Dios
del pobre ser humano...
Toda la tierra olía a cielo,
a mercadería celeste...
Bajo dos cabellos de Dios,
sobre un diente inmenso de Buda...
allí se prosterna el mendigo
esperando la voz de Dios
que está siempre en otra oficina (MIN).
Sin embargo, aunque deja sentada su
queja y no puede esclarecer el misterio,
Dios sigue apareciendo, nombrado aquí
y allá, sobre todo en el llamado desgarrador de ese amor que insinúa una plenitud, aunque siempre queda desbordado y parece querer estallar en un clamor
infinito. •
Este “vitalismo”
latinoamericano ha
sido destacado por
muchos pensadores
y varios escritores
latinoamericanos son
marcadamente
vitalistas, como
Alejo Carpentier, Octavio
Paz y tantos otros.
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