El Martes por la tarde disfrutamos de una hora en la piscina climatizada y jacuzzi del hotel. El cansancio acumulado del viaje y del esfuerzo físico, unido a la altura, no daba muchas más opciones, por lo que alrededor de las 22h gran parte del alumnado estaba descansando en sus habitaciones, o de tertulia en una de las salas de ocio habilitadas en el hotel.
El Miércoles, ya era el último día de esquí, podíamos notar cierta ansiedad de algunos alumnos por disfrutar de las bajadas de la “megaverde” y otras pistas de categoría azul (2º nivel de dificultad), así que tras una rápida comida, nos reclamaban a los profesores compañía para ascender a la zona alta de la estación. La sonrisa de felicidad deslumbraba en el rostro de los chicos, que disfrutaban dejándose caer y practicando lo aprendido en los días anteriores. Ahora si lo estaban pasando “genial”. Esa tarde, después de recoger todo el material de alquiler y devolverlo, dedicamos un tiempo a preparar el equipaje de regreso y después de la cena, nos permitimos dar un paseo por las calles de Andorra, que repetiríamos el Jueves por la mañana antes de la salida de regreso, para realizar algunas compras y regalos.
Por parte del profesorado, debemos expresar una enoreme satisfacción hacia nuestros alumnos, que demostraron comportamiento ejemplar en el viaje y deseamos incidir en lo enorgullecedor que es ver cómo estos alumnos han disfrutado y vivido esta inolvidable experiencia, que tanto lo ha sido para ellos, como para nosotros mismos, a pesar de lo agotador del viaje.
“Creo que la mejor palabra que describiría esta experiencia es BRUTAL. No olvidaré lo que he disfrutado, reído y vivido esos momentos con los profesores y amigos. Estaba muy bien organizado y ha sido uno de los deportes más bonitos que he practicado. En resumen, volvería sin pensarlo”. Daría Torres.
“Me lo he pasado muy, muy bien, las clases de esquí son divertidas y más si estás con tus amigos/as. Volvería a repetirlo muchas veces aunque el viaje se hace un poco pesado. Las noches han sido entretenidas hablando con los profesores y me he reído mucho” Gema Ruiz.
“Para mi fue una experiencia novedosa. Me lo pasé muy bien con mis amigos bajando las pisatas aunque me caí muchas veces. En el hotel, la piscina me encantó, sobre todo la bañera de hidromasaje. La última noche descansamos muy poco hablando unos cuantos amigos en la habitación”. Víctor Fortuna.
“Me lo he pasado muy bien, lo único malo fue la duración del viaje que se tardó mucho, pero en general estuvo bien, nos trataron muy bien, tuvieron paciencia y nos contaban cosas. Hice nuevas amistades y lo que me llevo de allí son las amistades y experiencias vividas”. Angel Barrena.
Javi García (Profesor de tecnología)