Revista EntreClases Febrero 2018 | Page 27

MADRE DE ALUMNO DE 1º ESO: Adoración Domínguez

Medidas como la de los Alumnos Ayudantes son una forma de comenzar la difícil andadura de acabar con el acoso.

Me parece positivo que haya alumnos que puedan ejercer de hermano mayor de los que ingresan en los institutos, ya que es una posibilidad de que se ”responsabilicen” de lo que realmente está sucediendo en sus centros o su entorno. A la vez supone una oportunidad para que los chicos puedan en cualquier momento acudir a estos mediadores del tutor, con la confianza de que pueden resolverles sus dudas y miedos. Esta labor es bastante importante incluso a la hora de proporcionar una rápida y eficaz integración de los que empiezan, pero no olvidemos que, aunque esta actuación de los alumnos-ayudantes es muy positiva, debe ir supervisado por el propio centro y comprobar si realmente la medida es efectiva.

Me parece interesante que sean los propios alumnos (ayudantes) los que se sensibilicen ante situaciones de acoso, porque ellos mismos podrán practicar la empatía ante situaciones difíciles.

Dado que el entorno en que se mueven la mayoría de los estudiantes es a través de redes sociales puede ser una herramienta eficaz para detectar casos de ciberacoso, sobre todo porque ese mundo al que están habituados ellos, es ajeno o está vetado a nosotros como padres.

Por último quiero decir que es fundamental un compromiso de todos los que formamos parte de la vida de nuestros hijos.

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