Revista EntreClases Enero 2019 | Page 5

Cuando se acercan los últimos meses del curso, siempre hay alguien que se ha planteado o tiene la intención de realizar los mismos estudios en los que yo me encuentro y las dudas que me presenta suelen ser las mismas, «¿tiene futuro realmente?» «si me voy a Madrid será mejor ¿no?» Quiero aprovechar el artículo para responder, desde mi breve experiencia, estas preguntas a futuros interesados, pues mi respuesta, hasta ahora, no suele variar mucho. En cuanto a la primera pregunta, si bien es cierto que son carreras con un futuro complicado (hablo de las enseñanzas artísticas en general), no podemos abordar estos estudios si solo nos importa el nivel de paro que hay en la profesión pues estaríamos eclipsados por el resultado final, lo cual es la muerte de todo proyecto artístico. El futuro profesional lo marcamos nosotros mismos y debemos tener claro que al salir de esta carrera, al igual que de muchas otras, no va a venir nadie a llamarnos a nuestra puerta para trabajar en uno de esos proyectos millonarios, lo cual no quiere decir que no haya trabajo pero si que hay que pelearlo o generarlo con las herramientas que tengamos. En cuanto a la segunda pregunta, cada vez tengo más claro que no importa dónde estudies si hablamos de la formación que vas a obtener puesto que hay grandes profesionales en cada rincón de este país, pero si importa el estado profesional de tu entorno, en ciudades como Madrid o Barcelona habrá más proyectos profesionales pero también será más difícil acceder a ellos puesto que habrá más competencia, por el contrario, en ciudades más pequeñas como Sevilla o Málaga, puede que haya menos proyectos pero estos sean más accesibles, realmente no hay una verdad absoluta sobre dónde podrás encontrar más salidas profesionales una vez hayas acabado o mientras estés realizando tus estudios, pero si es cierto que siempre puedes ir dónde te plazca una vez hayas acabado para probar suerte. En definitiva, instalarse en una ciudad o en otra no te asegurará nada, pues tendrás que trabajar igualmente para conseguir una buena técnica y buenas relaciones en el sector.

Probé suerte en Madrid y en Sevilla y, aunque debo reconocer que en un primer momento me dolió no haber pasado las pruebas en Madrid, lo cierto es que agradezco enormemente que solo me aceptaran en Sevilla pues me facilitó las cosas a la hora tomar una decisión más y me dio ese último empujón para instalarme en esta ciudad en la que después de cuatro años, estoy cursando mi último curso en la Escuela Superior de Arte dramático en la especialización de interpretación textual y puedo decir libremente que es una de las mejores decisiones que he tomado hasta el momento. Sevilla no deja de aportarme cultura, formación, entretenimiento y experiencia profesional, pues tengo la suerte de compaginar mis estudios con trabajos artísticos ajenos a la escuela con compañías como "La Contenida" con la que estamos preparando la cuarta temporada de la obra que tenemos entre manos.