“Debió agregarse un tercer curso, y potencialmente está la idea de
abrir un cuarto, con pre-inscripción, a las 19 horas. Ahí iremos viendo
la respuesta. A mediados de cada mes se debería ir renovando la
inscripción y dependiendo de la demanda se podrán abrir nuevas
alternativas”, señala Franco.
Las clases de spinning, que están a cargo del profesor Cristián Daza,
tienen un valor de $10.000 mensuales. Si ya está inscrito en el programa
“Yo Deporte Adulto” solo debe cancelar $7.000, y si está inscrito en la
promoción del gimnasio “Polideportivo de la Hispanidad”, el monto baja
a $3.500 mensuales. Los cupos se otorgan por orden de inscripción.
Daza cuenta que la actividad de spinning en el estadio no es totalmente
nueva. “Evolucionó de ser una clase informal, dos días a la semana, con
unos pocos entusiastas que participaron durante más de un año. Ellos
empezaron a contagiar a otros interesados a través del boca a boca.
Prendió y ahora se mejoraron las máquinas. Estas poseen monitor con
velocímetro, contador de kilometraje, y contador de calorías y tiempo”.
Los beneficios de realizar spinning con regularidad y bajo la
prescripción de un profesional del área son numerosos. “Mejora el tono
muscular, disminuye la rigidez de las extremidades inferiores, mejora la
cali dad de sueño, fortalece el tejido óseo, elimina el estrés, mejora la
resistencia, aumenta la fuerza de las extremidades inferiores, produce
beneficios cardiovasculares, disminuye la tensión arterial, reduce la
frecuencia cardíaca de reposo y ante el esfuerzo, mejora la ventilación
pulmonar, acelera el metabolismo, quema calorías, reduce el peso
corporal, el porcentaje de grasa, y el perímetro de la cintura y de los
muslos”, asegura el profesor.
Por si fuera poco, agrega que “es una actividad colectiva, segura y
no tiene impacto sobre las articulaciones, fomenta la sociabilidad,
estimula la superación y cada uno la puede ejercitar a un ritmo propio”.
Y después de tantas utilidades que conlleva el pedalear al ritmo de la
música, siguiendo las instrucciones, bueno sería probar. ¡A inscribirse
entonces!
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