entrar.
El aborto es el “y vivieron felices para siempre” de las relaciones de
usar y botar.
En la autopista de madrugada. Ciudad no es ciudad. Tiempo no es
tiempo. Los carros se pasan unos a otros. Cambio de luces. Vivir lo
más rápido posible.
30
Soy lo que está lejos de mí. El adicto es la droga de su droga.
Echados en la arena, la nota del ácido todavía removiéndoles el
cerebro, Maxi y Carlos comprendieron que vaya mierda de mundo el
que habíamos heredado. Que todo era culpa de Platón. Que lo mejor
hubiera sido hacerle caso a Diógenes de Sínope desde el principio. Maxi
estaba obsesionado con Diógenes el cínico, ese jipi de la Antigüedad
que se burlaba de la sociedad ateniense desde su tonel.
Carlos y yo íbamos a controlar a Pinto Salinas. Todos conocíamos
a Grecia, la del volkswagen escarabajo y los ciento cincuenta quilos
(físicos y cocaínicos).
I’m torn between the Light and Dark, while others see their targets
divine symmetry. Drogarse es jugar a no estar viva. Entre dosis y dosis,
entre rumba y rumba, el Y[\