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país puede estar yéndose a la mierda, pero no importa. Tres rayas y
todo bien.
El mejor rock es el clásico, si no es old school no es nada. Vacílate la
dinámica en Harvest, de Neil Young.
Y al día siguiente la esponja en la cabeza. Sudor, náuseas y por qué
no te bañas. Culpa y odio. Una cervecita para activarse. A cuadrar la
próxima rumba.
Siempre me mostraba en la Telecaster las melodías que se le iban
ocurriendo. Yo toda pendeja mirándolo tocar.
Pero cómo no amar su melena negra, cómo no amar su amor por la vida,
el vino, la buena vibra por encima de todo. Cómo no amar su corazón
infantil, sus pataleos de niño malcriado, su amor por los sonetos de
Quevedo y Gutiérrez de Cetina. Yo lo acompañaba a cada ensayo con el
Roro y el Cheky. El toque es este viernes y a nadie le cuadró la agenda
hasta hoy.
Nada como bajar a la playa a tomarse unas birritas, comer pescado
frito, escuchar The Abyssinians, tragarse unas piolas y caerse a porros
a la luz de la luna.
Con este biquini se me nota demasiado la celulitis.
No es que no me guste el sexo. El sexo es el medio, nunca el fin. Helena
fue la que me besó primero. Después vino la lengua y nos gustó la cosa.
Seguimos besándonos, empezamos a tocarnos y cómo me excitaba la
idea de todos ellos mirándonos perplejos.
Hubo un tiempo en que lloraba mucho.
Mi papá dice que me interno o me centro, me paso 6 meses en
rehabilitación o me caso, me suicido o me busco un hombre decente y
trabajador. La elección es tuya: la muerte o la edad adulta. Mi papá no
se mete mucho en mi vida porque se pasa el día intentando componer
los asuntos del país. Hacia dónde vamos, dice. Tienes que votar en las
próximas elecciones, dice. Tienes que ir a la marcha.
Antes muerta que internada. Asistir cada día a reuniones pavosas donde
se habla de cómo mi gato se murió y lo triste que me puse. Grupos de
apoyo para leer y ref lexionar sobre las profundísimas enseñanzas del
Solo por hoy. Cerramos los ojos para meditar y yo pensando qué carajos
querrán decir con Poder Superior. Si sigues las reglas, te damos puntos
por buen comportamieto. Si llegas a 100, igual te dejamos salir al patio
a hablar con los pajaritos. Lo llamamos plan motivacional.
Cuando las gotas comienzan a bajarte por detrás de las fosas nasales.
Nosotros los pitiyanquis le decimos dripping.
Al ver la alcabala policial, sabes que te van a hacer bajar del carro y