S SEAN DE GOLES
comienzan una nueva vida, pues semanas después una empresa
les brindó una vivienda completamente amoblada.
A causa del desastre, el presidente Pablo Kuczynski invirtió
más en la infraestructura de las escuelas en el norte de la costa
del país. El gobierno anunció un programa de tres años con un
estímulo económico de 5.500 millones de soles (1.7 mil millones
de dólares), que reforzaría la infraestructura a nivel nacional. Esto
incluye la edificación de miles de casas a prueba de terremotos
en áreas menos propensas a inundaciones, añadió el presidente.
Con cada desastre hay un milagro para equilibrar, sino fuera por
las lluvias, muchos no se hubieran beneficiado de este proyecto.
Muy pocos pensaban que habrían más milagros en lo sucesivo de
este año impresionante.
A pesar de todo, el año entero no fue todo un desastre. Contra todo
pronóstico, la Selección Peruana clasificó al Mundial de Rusia
2018 gracias a una espectacular remontada en las eliminatorias
sudamericanas, un entrenador que avivó las esperanzas del
hincha peruano y un contundente triunfo en el repechaje ante
Nueva Zelanda. La selección nacional no asistía a un mundial
desde España en el 82.
Al principio de la competición, Perú se encontraba en una
posición muy complicada después de sufrir varias derrotas.
Las posibilidades de calificar al mundial se veían mínimas ya
que se encontraban lejos de la quinta posición en la tabla de la
conmebol, lo necesario para ir al repechaje. Llegando a finales de
la jornada, la selección no podía arriesgar perder ni un partido
si quería un cupo. En las últimas seis fechas de la eliminatoria
sumaron 12 puntos, que era lo suficiente.
Sin embargo, los triunfos para los peruanos no se consiguen fácil.
En los últimos minutos del partido ante Uruguay, el delantero
Cavani cabeceó y falló el gol que haría el empate, rebotándolo del
arco. Luego contra Bolivia, en los últimos minutos del partido,
la nación sufrió un infarto colectivo después que el volante
boliviano, Justin desperdició una increíble oportunidad de gol de
empate. Como no hay victoria sin sufrimiento, en el partido ante
Ecuador, se descontó un penal y en esa misma jugada se expulsó
al jugador peruano, Christian Ramos con solo diez minutos para
restar el partido. Este fue un partido histórico ya que nunca habían
ganado de visitante en Quito para la clasificatoria al mundial. En
la última fecha contra Colombia, nuestro capitán, Paolo Guerrero
nos dio el boleto al repechaje luego de un estupendo gol de tiro
libre que era indirecto. Los hinchas peruanos quedaron con la la
boca en el piso cuando el arquero colombiano la tocó y el gol fue
validado. Con la última victoria ante Nueva Zelanda, el estadio y
el país explotó de orgullo y fueron contagiados con lágrimas de
felicidad por su selección.
Muchos jóvenes, y hoy en día adultos crecieron viendo a su
selección clasificar al mundial, pero gran parte de la población
peruana nunca los han visto en esa posición. Durante treinta y seis
años de sufrimiento, los padres soñaron en ver al Perú clasificar
junto a sus hijos. Hubo padres y familiares que fallecieron antes
de gozar la clasificatoria, entre ellos los damnificados de las
lluvias torrenciales y muchos más. Para aquellos hijos que sienten
un vacío en su ser después de perder a alguien especial, ellos se
sienten más conmovidos para alentar a su selección teniendo
en cuenta lo significante que era el fútbol para los que no ya no
están. Por eso el fútbol no es solo fútbol. Establece conexiones
entre generaciones, familias y una nación y esta compasión nunca
muere. Revirtamos la historia PERÚ!
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