la letra grafitera
se enfoca más en los mensajes políticos
y comentarios socioculturales. Hay
más respeto por la calidad y capacidad
artística.
Bastardilla, una de las grafiteras más
grandes de Colombia, sirve como esa voz
para los marginalizados. Desde su país de
origen, Bastardilla se dedica a las causas
sociales. Su estilo es fuerte y surrealista,
claramente influido por el arte indígena.
Usa colores saturados, líneas gruesas
y fuertes negros. La mayoría de sus
murales comentan acerca de la violencia
contra la mujer tan prevalente en
sudamérica y cada región del mundo.
Bastardilla ilumina los obstáculos y los
riesgos enfrentados por las mujeres día
a día. Quiere que la gente se fije menos
en el mundo masculino, y que le dé más
prioridad a una perspectiva diversa.
Su pasión viene de la experiencia
personal. En una de sus pocas entrevistas,
Bastardilla relata, “como mujer, he tenido
que luchar contra este tipo de realidades,
contra el hecho de que la gente quiere
asaltarme, que no soy tomada en
consideración por muchas cosas. Y he
tenido que luchar contra un mundo que
todavía se está volviendo principalmente
alrededor de los hombres”.
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