PROYECTO OVNIS 5 - LA GRAN CONSPIRACIÓN EXTRATERRESTRE PROYECTO OVNIS 5 - CONSPIRACIÓN EXTRATERRESTRE | Page 34

Proyecto Ovnis 5 colectiva, así surge la conspiración religiosa, es más, estamos en el origen mismo de las religiones. Ahora bien, todo cuadra, la conspiración monoteísta y la unidad del culto. Las religiones fueron concebidas para abolir el paganismo, y es parte de una conspiración mayor, la instauración de un Gobierno Mundial precedido por un mesías sacerdotal. Todo esto tiene una lógica sorprendente; sólo una humanidad amnésica de su linaje divino aceptaría un sacerdote como nexo con la divinidad perdida; ergo, una vez logrado este objetivo es posible crear una religión. Una vez aceptado un rango secundario del hombre ante el “único” representante de la deidad, el sacerdote, sólo haría falta lograr la unificación política, abolir todo vínculo de sangre y suelo, el “völks”, es decir, la nación. Y es allí donde fracasó la estrategia sinárquica, ya que antes de dar ese paso, había que asumir el control financiero, lograr la unificación financiera, cosa que los sacerdotes comprendieron después de los sangrientos fracasos por lograr la hegemonía política, primero con la Revolución Francesa y luego con el comunismo. Es por eso que ahora, el sistema está empeñado en lograr la unidad financiera, una sola moneda mundial, un solo monopolio de banca global. Pero eso lo veremos más adelante. Las Castas Sacerdotales. Son los conspiradores por excelencia, tratando de usurpar la función regia se la pasaron siglos desestabilizando reinos, corrompiendo naciones, institucionalizando cultos, embruteciendo a los reyes y a las aristocracias que los dejaron penetrar en sus feudos. La función sacerdotal se puede comprender como un tipo psicológico colectivo, es decir, un egrégoro que neutraliza la autonomía de la psique individual y ante el cual no tiene la capacidad volitiva de resistirse, imponiéndole su culto. Es un tipo de psicosis aparentemente inofensiva, sin embargo cuando el fanático se auto castra en el éxtasis místico, o cuando destruye llevado por los más apasionados sentimientos, caemos en cuenta que de “inofensiva” no tiene ni la más mínima mota. 36