Odebrecht la holding del diablo Odebrecht | Page 6

6 | Página Hacia 1964, la compañía ya construía rutas, hidroeléctricas y centrales nucleares como la de Angra dos Reis. Para 1979, se extendía a Perú y Chile y de "ahí al infinito y más allá", convirtiéndose en la mayor constructora de la región y una de las mayores del mundo. El imperio crecía y Marcelo estudiaba: ingeniería civil primero, y maestría en negocios, después, en la exclusiva Suiza. Para 1992, ya ocupaba un sillón en la empresa familiar. Y sin cumplir aún los 40 años, asumió el control total del imperio. Con Marcelo Odebrecht en el "puente" de mando la empresa floreció con el viento de cola de la gestión de Lula da Silva, y luego con Dilma. Brasil se sumergía en obras faraónicas y allí estaba Odebrecht para hacerlas realidad: estadios de fútbol, autopistas, aeropuertos... el Mundial, los Juegos... Y en el mundo se abrían más frentes de trabajo en decenas de países. Aquello era el paraíso para un monstruo empresarial. Pero para 2015, el implacable Juez del Lava Jato Sergio Moro aplastaba al monstruo como a un bicho. La Operación Lava Jato indagó en los contratos públicos que dejaron al descubierto la firma de Odebrecht. El príncipe se vio entre rejas. La economía brasileña se derrumbaba y el imperio sucumbía en el desprestigio. Los contratos desaparecieron.