Cabrera- Zwenger- D’Agnillo- Rodriguez
Epilogo.
Las historias verídicas que tiene lugar en Arquitecto Tucci sobre temas tan estremecedores
como las de abusos y violaciones deben ser escuchadas por la comunidad más allá de sus
límites. Es una problemática que afecta a miles de personas día a día sin que el Estado les
provea ningún tipo de solución ni contención. Ante esta ausencia y desamparo el hecho de
denunciar no parece la mejor opción.
La violencia está inserta en sus historias, en el contexto socio-cultural... y en su
cotidianeidad conyugal y familiar. En la violencia la opción de decisión es anulada, se
manipula al otro para anular su posibilidad de pensar, creándole un agujero mental. La
persona violentada se aliena; si la violencia es permanente vive en estado de amenaza, deja
de desear. Violencia remite a violación: con todo su sentido metafórico: provocar un
agujero en un espacio que no lo tiene o utilizar los preexistentes para doblegar y quitarle a
la otra persona su opción de dejar entrar o prohibir entrar. Es la opción de decisión que la
violencia y el violador quitan al violentado. El abuso sexual y violaciones cometidos a
niños, niñas adolescentes es una de las peores formas de violencia. Muchas veces las
víctimas se sienten cómplices, impotentes, humillados y estigmatizados sin poder recurrir a
alguien que pueda ayudarlos o en ocasiones recurren a las personas equivocadas que le
restan importancia a su relato. Si indagamos en su historia es probable que encontremos
antecedentes de abandono, malos tratos y baja autoestima.
En otras palabras, podríamos concluir que lo que generan dichos abusos sexuales por parte
de un miembro de la familia en la víctima es una total deshumanización ya que el lugar
donde deberían sentirse resguardados y debería remitirles seguridad y tranquilidad, es en
realidad todo lo contrario. El ser víctimas de violación por parte de un miembro de su
familia, conlleva a la pérdida de la persona, al paso de sujeto a objeto; así, es que la persona
deja de pensar, ya no siente, ya no se opone a lo que puedan llegar a hacerle porque ya ha
concebido que su cuerpo no le pertenece y por lo tanto, no tiene valor alguno al igual que
su vida. Mientras más personas pasen por