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Por: “L”
Grado 10 A
Eres la linda esencia de una margarita.
Al unirnos, somos el gesto de esa vulnerabilidad que hay entre el sol y la noche.
Cómo adorar tu gesto tan inexplicable de ser y actuar,
que entre verano y otoño hay diferencia y ansia de verte llegar desde un principio hasta el final,
que entre llanto y alegría queda por describir la elegancia de tan importante y sensible persona.
Siento en mi corazón una colmena vibrando sin cesar al escuchar tu lindo nombre,
llevo en mi pensamiento la victoriosa e innecesaria casualidad,
donde tus manos son esa dificultad que nunca quisiera soltar.
Por: Ingrid Yulieth Jóven
Grado 10 A
Llevo en mi corazón tu nombre, Mailen
tu nombre sabe a melocotón y arequipe,
a anhelo de cada mañana,
a imposible,
a ángel.
Tu nombre sabe a naturaleza
A amabilidad y humildad
A diciembre y frutos de noche buena
Y,
a abril
Y porque no puedo hablarte de otra manera, sino con mi llanto de cada día, tu nombre lo llevo en mi corazón.
Por: Juan Camilo Mahecha
Grado 10 A
Cada vez que escucho tu nombre recuerdo el calor de hogar,
Comidas calientes en la mesa, recuerdos felices a tu lado.
Tu nombre es como el agua que necesitan las plantas para vivir.
Tu nombre es seguridad, confianza y apoyo
Pero tu presencia es la que motiva mi alma a amar,
A ser feliz pase lo que pase.
Porque solo tú, madre, me apoyas sin importar las circunstancias
siempre estás ahí cuando más te necesito.
Tú, que sufriste nueve meses para amarme toda la vida,
mujer luchadora y protectora.
Porque nunca habrá amor como el tuyo.
Por: Jeison Gómez
Grado 10 A
Con un espejo podría verme,
pero con ese espejo puedo admirarte
admirar tu belleza,
tus ojos,
tu boca,
tu cuerpo,
todo de ti.
Para qué quiero mirarte
si te puedo tener.
Pero eso no es más que mi ilusión, al pensarte y verte en mi retrato junto a la pared…
Por: Juan Diego Oyola
Grado 10 A
Tu nombre me sabe a hambre, sobre todo cuando llegó de jornada única
tu nombre me recuerda los mandados a la tienda de Don Jesús
tu nombre me recuerda que me quieres sin interés
tu nombre me recuerda que por arte de magia,
me aparecen los uniformes limpios en el cajón la habitación.
Por: Juan Carlos Celis
Grado 10 A
Tu nombre me recuerda una ventisca de otoño,
simple y placentera.
Tus recuerdos son diferentes de los míos,
pero aun así, compartimos los mismos.
Estoy ciego desde que te fuiste,
Me hace falta tu luz en esta terrible oscuridad.
Siempre correré en desasosiego, tratando de encontrar aquella luz,
aquella luz que me convirtió en este bello infierno,
un valle sombrío y sin sentido.
Necesito del veneno de tus labios,
el calor de tus abrazos,
así como el humano necesita oxígeno para vivir.
Ahora estamos aquí,
pantalla por pantalla,
frente a frente,
tratando de romper la barrera,
romper el silencio,
romper la distancia,
Y hacer de este infierno un bello paraíso.