MINERVAS Enero 2015 | Page 27

COMUNICACIÓN DE GNOSIS UNIVERSAL! comunes siguieran la ley del Dharma , consignándola en preceptos predominantemente éticos y en enseñanzas casi exclusivamente psicológicas, reservando el más elevado conocimiento, en especial los cosmogénicos y los antropogénicos para quien los pudiera comprender y aprovechar. Hay pues, una diferencia entre el Budismo ortodoxo, o sea, la enseñanza pública de Gautama el Buda, y su Budismo Esotérico. Su Doctrina Secreta en nada difiere de la de los brahmanes iniciados de su tiempo. El Buda era un hindú de nacimiento, un kshatrya, discípulo de los “nacidos dos veces” (los brahmanes iniciados) o Dvigas. no” (Mateo 13:10-11); “Era por medio de numerosas parábolas de ese género que Él les anunciaba la palabra, conforme eran capaces de comprender. Y no les hablaba a no ser en parábolas; a solas sin embargo se las explicaba a sus discípulos” (Mateo 4; 33-4); “Muchas cosas aun tengo que deciros más aun no las podéis entender” (Juan 16-12). En el Judaísmo encontramos esa gran tradición oculta que es la Cábala(Kabalah). En el hinduismo, escuelas casi esotéricas, como la Ve d a n t a o S a n k h y a , d o n d e e s francamente reconocida la existencia de una Gupta-Vidya, es decir, una sabiduría (Vidya), secreta u oculta (Gupta). En cuanto al Budismo, varios autores (sobre todo occidentales y no budistas…) niegan la existencia de cualquier vertiente esotérica o secreta, invocando las siguientes palabras atribuidas a Gautama “El Tathgata no actúa con el puño cerrado del profesor que oculta a su pupilo algún conocimiento esencial”. Sin duda Siddharta Gautama presentó públicamente todo lo que era fundamental para que las personas ENERO, 2015 abandonados al cuidado de Lamas no iniciados y de innovadores mongoles ” Por otro lado, como observa el profesor Max Muller –figura legendaria de la ciencia de las religiones, especialmente orientales: “De acuerdo con la tradición conservada por las escuelas budistas, tanto del norte como del sur, el canon sagrado comprendía, en su origen, de 80.000 a 84.000 tratados; la mayor parte de ellos, sin embargo, se perdió, restando apenas unos 6.000 . Helena Blavatsky (que citaremos muchas veces, habida cuenta que fue la mayor ocultista de los últimos siglos) pregunta a propósito, con mucha oportunidad: ¿Estarán esos tratados (cuya dimensión total excede en muchas veces la de la Sus enseñanzas no pueden pues, diferir Biblia) totalmente perdidos… o serán de las de éstos últimos, ya que toda la c o n s e r v a d o s p o r c í r c u l o s m á s reforma budista consistió en revelar una esotéricos? parte de lo que había permanecido secreto (…). Continuará en la edición de febrero de 2015 Impedido, por fuerza de su juramento, a enseñar todo cuanto le había sido comunicado, y aunque anunciase una filosofía formada con la tesitura de la verdadera ciencia esotérica, Buda no presentó al mundo sino el cuerpo material y externo de esa filosofía, reservando el alma para sus elegidos. Varios sinólogos han oído hablar de la “doctrina del alma”, mas ninguno parece haber comprendido su verdadero significado e importancia. Existe un esoterismo budista, que, en c i e r t o m o d o s e d e j a e n t r e v e r, especialmente en las formas más puras del budismo septentrional y tibetano. Este último se encuentra hoy muy cambiado; ya a finales del siglo XIX Helena Blavatsky se lamentaba de ver “cuanto sufría la pureza original (…) estudiando alguna de los llamados sistemas budistas “esotéricos” de la antigüedad en su aspecto moderno, no solo en China, sino en los otros países budistas en general, inclusive en no pocas escuelas del Tibet, PAGE 27