COMUNICACIÓN DE GNOSIS UNIVERSAL!
ENERO, 2015
S A B I D U R Í A O C U LTA . PA RT E I
Por:
Antonio
Sanchez
ARISTOTELES
R.L. Luz del Toa 86
Miembro de la R.L.
de Investigación
José G. Bloise 113
Sabiduría Oculta
Parte I
Sumo Sacerdote
Aunque la Sabiduría Esotérica en
cuanto tal, e independientemente a esa
designación, tiene una antigüedad
inmensamente mayor, el término
“esotérico” (en contraposición a
“exotérico”) surgió hace casi 2.500
años en la Grecia Antigua. Aristóteles
escribió varios artículos destinados al
público, al que él mismo llamó
exotéricos (exoterikoi logoi). A estos se
contraponen los acromáticos,
destinados a ser oídos en su Liceo, o
esotéricos, por contener una doctrina
secreta, destinada solo a sus
estudiantes. También Aristóteles da a
entender con claridad que el gran
Platón impartía una enseñanza más
profunda y secreta, que nunca dio a
conocer públicamente; de hecho,
Platón declaro varias veces que jamás
podría transcribir por escrito todo su
sistema.
grandes escuelas filosóficas de la
Grecia antigua.
La sabiduría Universal
La distinción permaneció en varias
escuelas filosóficas helenas. Ya
Pitágoras definirá tres círculos de
estudiantes en su comunidad,
reservando las enseñanzas más
profundas y significativas solamente
para los alumnos más perseverantes y
capacitados por una gran y bien
mantenido esfuerzo de mejoramiento.
Esta diferencia más o menos
semejante se mantendría en las
Por encima de la manera de designarlo,
es un hecho universalmente conocido
la existencia de una enseñanza más
interna, exigente y difícil de entender
(así como vivirla), en la generalidad de
las religiones y de las grandes escuelas
filosóficas o tradiciones espirituales y
por eso mantenido en secreto para la
gran mayoría de las personas.
El Cristianismo no es excepción, al
menos en los primeros siglos, como
podemos verificar en las Epístolas de
San Pablo, y en los escritos de San
Justino, San Ignacio de Antioquia,
Clemente de Alejandría y Orígenes ,
por no hablar de diferentes grupos
gnósticos de los siglos I al IV. Si existe
alguna duda, basta recordar las
palabras de Jesús, en los propios
térm