Military Review Edición Hispano-americana Cuarto Trimestre 2016 | Page 81

CHINA-EUA E n 2015, tuve la oportunidad de ser el anfitrión de un alto oficial de China en su visita a Estados Unidos. Durante la visita, constantemente expresó que Estados Unidos debe respetar a China y que no debe seguir una política de contención. Sin importar el tema de discusión, el oficial siempre regresó a este tema. Me pareció que esta percepción de persecución bordeó la paranoia. Dando por hecho que las declaraciones del oficial chino representaron los puntos de vista de los líderes de su país, me acordé de la situación con Alemania imperial antes de la Primera Guerra Mundial. Un miedo irracional de envolvimiento incidió en la clase política y militar de Alemania, una mentalidad que contribuyó al comienzo de la Primera Guerra Mundial. Me preguntaba si los actuales líderes chinos, parecidos a los líderes alemanes del pasado, comenzaban a pensar que otros países en su región intentaban rodearlos. Si es así, el precedente histórico sugiere que dicha paranoia por parte de China podría tener graves consecuencias, especialmente si China reaccionara de manera exagerada a las amenazas percibidas sobre su soberanía. A fin de evitar esta confusión y las consecuencias que podrían resultar, Estados Unidos y sus socios de Asia-Pacífico deben esforzarse por desbaratar la idea —donde exista entre los líderes chinos— que Estados Unidos y sus socios intentan encerrar a China. Estados Unidos puede evitar esta confusión con una estrategia de equilibrio cuidadosamente implementada. Alemania antes de 1914 En 1871, una Alemania unida surgió en el escenario mundial como una gran potencia después de la derrota espectacular de Francia en la Guerra Franco-Prusiana1. Antes de 1871, las poblaciones germánicas estaban divididas en decenas de reinos, ducados, principados y ciudades libres, así como dos grandes Estados alemanes, Austria y Prusia—que estaban compitiendo por el liderazgo de esta mezcolanza extensa de entidades políticas. En esta contienda, Prusia había aumentado de manera constante en poder durante el transcurso de los siglos XVIII y XIX, obteniendo gran influencia entre estos distintos Estados alemanes, la mayoría pobres, mientras la influencia de Austria lentamente había disminuido. Sin embargo, estos Estados alemanes poderosos estaban compitiendo por unir a los reinos de etnicidad alemana más débiles bajo una sola bandera de liderazgo de habla alemana2. MILITARY REVIEW  Cuarto Trimestre 2016 La competición llegó al punto crítico en 1866 cuando Austr