Mi primera revista Boulevard del Vino, Talca

Fotografo: Sebastian Abeliuk Exitosa décima versión del Boulevard del Vino muchas más. Por Jorge Ricci Avalos U na verdadera misión imposible puede ser saber cuál es el mejor vino de la región del Maule. Sin embargo, algo totalmente posible es poder degustar la mayor cantidad de tintos o blancos que se pueda en la décima versión del Boulevard del Vino, que se viene realizando desde hace un tiempo en la Plaza de Armas de Talca. Una vez más el vino fue el protagonista de una de las principales fiestas costumbristas de la región. En la ocasión dijeron presentes importantes Viñas como Balduzzi, Casa Donoso, Corral Victoria y Aromo, entre otras. El Boulevard del Vino ya es una tradición del mundo vitivinícola, emplazado en la séptima región, zona que se caracteriza por su potencial vitivinícola, donde se produce más de la mitad del vino nacional. Aquí se concentra gran parte del poder del vino chileno. La iniciativa organizada por la Corporación de Cultura de la Municipalidad de Talca y la Ruta del Vino del Valle del Maule, es el hogar de las mejores cepas de la zona, destacando ejemplares como Late Harvest, Chardonnay, Sauvignon y Quien busca un buen vino no debe dejar de asistir a este evento de dos días y que año a año recibe un público promedio de 7.000 entusiastas. Es un evento de corte más familiar, donde todos se conocen con todos pero además, el que llega hasta aquí se encuentra acompañado de actividades culturales y excelente gastronomía. Apertura al turismo El Maule, no solo se caracteriza por sus inmejorables vinos, sino que también por su romanticismo, arquitectura patrimonial y por ser una ciudad que permite la inolvidable experiencia de poder viajar en tren. Por otro lado, después del terremoto del 2010 se convirtió en una incubadora natural de emprendimientos vinculados al mundo del vino, gastronomía y otros atractivos proyectos que se pueden ir descubriendo a medida que se conoce la capital regional. Uno de estos proyectos es el que hace que se vea más hermoso el barrio Brilla el Sol, donde desde hace 3 años que vienen pintando murales con diferentes motivos en las paredes y fachadas del sector. Una de las particularidades de esta iniciativa es que las pinturas por lo general relatan la historia del barrio y también de quienes viven en las casas donde se puede ver un mural de estos. Dentro de este programa también se construyó un SkatePark y una piscina que pueden ser utilizados por los vecinos. Ahora bien, al igual que el resto de la ciudad, se puede realizar un tour por el barrio, donde un guía capacitado va relatando la historia de estas verdaderas obras de arte. El recorrido comienza en la Plaza de Armas de Talca, pasando por calles Alameda 11 Oriente y Estero Piduco y al terminar se Retorna a La Plaza. “Este es un proyecto que queremos mucho porque le ha dado una nueva vida al Barrio“, comenta Doralisa Guzmán, presidenta de la junta de vecinos barrio Brilla el Sol. Restaurant Club Unión Social: un lugar lleno de historia Talca lo tiene todo. Buen vino, exquisita gastronomía y un amplio abanico de posibilidades si lo que se quiere es disfrutar de sus bondades. Una de estas opciones es el Club Unión Social (Salón Capital), lugar que es dueño de una particular historia. Dentro de sus paredes se acuñó una singular anécdota que tiene relación con Jenaro Gajardo Vera, que fue el chileno que se convirtió en el dueño de la luna al registrarla en el Conservador de Bienes Raíces de la ciudad. Gajardo ya había declarado este cuerpo celeste como de su propiedad en 1954. No obstante cuando el abogado intentó ser miembro del exclusivo grupo que por entonces celebraba sus reuniones en la sede social, su moción fue denegada por no poseer una propiedad y en definitiva de patrimonio. Entonces fue cuando se dio cuenta de que nadie había inscrito la luna a su nombre aún y luego de realizar los trámites pertinentes, su registro del satélite natural fue aceptado. Hoy el Club Unión Social es parte del proyecto del empresario Manuel Salazar, quien desde ya hace casi un año, se ha propuesto revitalizar la sede, rescatando su rica historia y conjugándola con gastronomía de alto nivel. “Comencé con este proyecto por un interés personal de rescatar el patrimonio y este lugar es parte de la historia de la ciudad. Queremos que la historia de la sede se mantenga viva e incorporarnos al mundo del vino, realizar activaciones y eventos vitivinícolas”, explicó Salazar. Restaurant Club Unión Social.