MagLes Revista Lésbica MagLes 10 | El Punto G | December 2013 | Page 44

Columna Columna Canalla Mujer enfadada Las mujeres tenemos, por naturaleza, en general, facilidad de enfado. En mi caso, la lógica y la emoción se besan, se magrean y acaban en la cama entrelazadas... día sí, día también. No lo puedo evitar: en mi mente la subjetividad le da una paliza a la objetividad y no veo las cosas con perspectiva. Mis enfados son recurrentes, compulsivos e irracionales. Y de ellos, como del sexo, sólo se puede esperar una explosión final que te deja exhausta. Ayer me enfadé mucho por algo que no recuerdo. Hoy me ha venido la regla y me he quedado más tranquila. Cuando escuché hablar del SPM (Síndrome Premenstrual) por fin empecé a ser una mujer libre y feliz. Si me sentía triste y me comía una tableta entera de chocolate del Mercadona: el SPM. Si me enfadaba por cualquier chorrada y me daban ganas de pegar a la gente por la calle con los arbolitos de navidad de los chinos como arma: el SPM. Si me entraba una llorera imprevista y mocosa que me dejaba con el rimel a churretones por la cara: el SPM. Desde entonces me enfado, lloro y se me caen los mocos igual, pero al menos ya no es mi culpa. El problema son los días de la semana que viene, 44 MagLes #10 | diciembre 2013 porque claro, ayer era SPM, hoy es la regla, pero ¿qué pasa los días postregla que aún no son SPM? Me he inventado una solución perfecta: ) Los estrógenos A B) Asumir que yo soy así C S ) PM Como mis queridas lectoras ya sabrán, yo siempre elijo C de Coco. Pero cómo puede ser si ya hemos dicho que el Síndrome Premenstrual siempre es los días antes de la regla? Porque no me refiero a ese SPM, sino al Super Pivón Moreno que siempre, siempre, siempre tiene la culpa de todo, todo, todo lo que me pasa.